RENTERÍA - La unión hace la fuerza y el sábado volvió a ponerse de manifiesto sobre una cancha deportiva. El Eurocam Gure Auzune viajaba a Rentería con la complicada misión de romper una racha de cuatro derrotas en casa del cuarto clasificado. Todo un reto para el que contó con el apoyo de cerca de 40 aficionados que viajaron desde Gasteiz para animar a los hombres de Borja Arnedillo, que contra viento y marea lograron arrancar un valioso empate a 26 después de un partido que se convirtió en un carrusel de emociones, rachas y parciales para uno y otro equipo hasta el 26-26 que reflejó el marcador final.
El Eurocam Gure Auzune salió lanzado y un parcial inicial de 0-5 a su favor asentó las bases de las que serían sus opciones de éxito en Rentería. Pese a la tempranera expulsión de David Olivar, una de las bazas del Gure en defensa, los hombres de Borja Arnedillo mantuvieron las prestaciones demostradas de salida y lograron mantener ventajas de entre tres y cinco goles durante los primeros treinta minutos. Al descanso se llegaba con un 13-16 en el luminoso de Galtzaraborda y todo por decidir. “Tuvimos un comienzo brillante, defendiendo y corriendo muy bien y tomando una buena ventaja pero despistes y errores nos dejaban con uno menos demasiados minutos y Ereintza lo aprovechó”, resume el técnico Borja Arnedillo.
Pese al buen primer periodo, mantener la ventaja el segundo acto se presentaba complicado y el duelo no tardó en enredarse con exclusiones y decisiones arbitrales contrarias a los intereses gasteiztarras. La renta a favor del Eurocam se desvaneció a falta de menos de tres minutos para el final. En ese minipartido definitivo, el Ereintza tomó la primera ventaja y parecía que iba a llevarse el triunfo. “Pese a todo, el equipo logró aprovechar el último ataque y poner el empate. Ahí llegó la polémica con la mesa, que tan atenta había estado a el área técnica del Gure y que en ese momento no ve una invasión de campo clarísima del Ereintza que nos hubiera dado el último balón del partido”, lamenta Arnedillo. Pese a todo, el juego se reanudó con posesión para el conjunto local, que no pudo superar a la defensa del Eurocam, que defendió con uñas y dientes el empate en los últimos segundos para arrancar un punto muy trabajado que pone fin a una racha negativa de cuatro derrotas consecutivas.