madrid - El delantero del Atlético de Madrid Fernando Torres lamentó el arbitraje sufrido el martes ante el FC Barcelona, en el partido de ida de cuartos de final de la Champions que finalizó 2-1, y aseguró que es “una pena que la UEFA se preocupe de cambiar las camisetas y luego ponga un árbitro que no esté a la altura”.

“Estoy muy triste por haber dejado a mi equipo con diez. Estoy convencido de que con 11 jugadores habría sido diferente”, dijo Torres. “Pero también me voy con la sensación de orgullo por jugar en este equipo. Somos un equipo para todo y en todas las situaciones”, añadió el ariete madrileño tras la derrota en el Camp Nou.

“Una pena” Respecto a su expulsión en el minuto 35, Torres dijo que fue “una pena” por cómo se produjo la jugada. “Lo podíamos esperar. Cuando notas que te miden de una manera diferente es una pena. Puede ser o no tarjeta, es evitable. Lo que es una pena que se preocupen de cambiar las camisetas y luego pongan un árbitro que no esté a la altura de un partido de Champions League”.

Por último, Torres da “opciones” de pasar en el partido de vuelta porque lo “darán todo” en el Vicente Calderón. “Hoy es uno de los peores días que he tenido como futbolista, pero en el Calderón todo es posible”, finalizó el Niño. - Efe