Bilbao - El lenguaje no verbal resulta en ocasiones más profundo que el mejor de los discursos. Las palabras desde el atril tienden a visitar lugares comunes, a llegar manoseadas, a convertirse en frases hechas, una sucesión de tópicos de buenas intenciones y verborrea. Christian Prudhomme, director general del Tour, lo que viene a ser el patrón de la mejor carrera del mundo, bien pudo agarrarse a la vía diplomática, al decoro, al apretón de manos y a una foto de cortesía cuando recibió a Jon Odriozola, director del Euskadi Basque Country-Murias, en su despacho de París. Lo que podría haber sido un asunto burocrático para el Tour se prolongó durante cinco horas. Acabó en los postres de una comida.

“El recibimiento fue inmejorable tanto por parte de Prudhomme como de Thouad, el responsable deportivo. Ambos se mostraron muy receptivos y demostraron interés en nuestro proyecto”, explicó Jon Odriozola, que viajó junto a Francis Lafarge, relaciones públicas del equipo en Francia, para reunirse con la dirección de Tour y presentarles el proyecto del Euskadi Basque Country-Murias, que pretende participar en la carrera francesa a medio plazo. “La reunión se celebró para vender la idea y dar a conocer un proyecto que nace con la idea de futuro de poder llegar al Tour en un futuro y recuperar lo que aportaba la afición vasca a los Pirineos y lo que aportó el Euskaltel-Euskadi en su día”.

Grapado a esa idea, -el masivo desplazamiento de aficionados vascos a las laderas de los Pirineos entusiasma a los organizadores-, Odriozola destacó la buena sintonía con Prudhomme y el interés que el director del Tour mostró hacia el equipo con “preguntas concretas sobre los objetivos deportivos del equipo y el nivel que puede alcanzar. No se limitó a recibirnos y hacerse una foto. Quiso conocer cuestiones concretas y eso demuestra sus interés”. Además la reunión sirvió para que Euskadi Basque Country Murias tenga hilo directo con el Tour, “algo que no es sencillo y para lo que hemos trabajado. Este es el camino; dar pasos para afianzar el proyecto, como la presencia en el calendario francés el próximo año. A Prudhomme le gustó la seriedad con la que estamos trabajando en el proyecto”, enfatizó Odriozola sobre la “positiva” reunión con el Tour.