Si América tenía los Juegos Suramericanos y Asia los Juegos Asiáticos, era cuestión de tiempo que el Viejo Continente preparara su propio evento multideportivo para cubrir la ausencia de competiciones durante el verano previo a los Juegos Olímpicos. Así surgieron los Juegos Europeos, cuya primera edición se celebra desde el viernes hasta el 28 de junio. Bakú, capital de Azerbaiyán, es el escenario escogido para el debut de esta cita continental, restringida tan solo a deportistas europeos, y reunirá a más de 6.000 atletas de 50 países diferentes para luchar por las 253 medallas que se entregarán entre las 20 disciplinas a disfrutar. Un escalón por debajo de la cita olímpica, estos primeros Juegos Europeos sufrirán la ausencia de los principales nombres, la baja de medallistas de Londres con otros compromisos en su agenda que, sin embargo, serán sustituidos por grandes promesas que intentarán aprovechar su oportunidad para exhibirse en el escenario continental. A pesar de todo, la delegación vasca estará bien representada por once atletas que llegan a Bakú primero con el objetivo de lograr el billete para Río 2016 y, después, con la intención de coger la mejor forma posible para sus próximas competiciones.
La alavesa Maider Unda (lucha), los tiradores Pablo Carrera y Juan José Aramburu; la donostiarra Clara Azurmendi (bádminton), el portugalujo Kiyoshi Uematsu, Sugoi Uriarte, de Gasteiz, y la navarra Jaione Equiosain (judo); Josu Fernández, de Navarra, (waterpolo), la donostiarra Begoña Lazcano (aguas tranquilas), la triatleta zarauztarra Ainhoa Murua y el gasteiztarra Sergio de la Fuente (baloncesto 3x3) son los abanderados vascos en esta versión europea de los Juegos Olímpicos. De hecho, estos once elegidos acuden a Bakú con Río en la mente puesto que, tal y como explicó Mammad Ahmadzada, embajador azerbayano, “dieciséis de las veinte modalidades serán clasificatorias para los Juegos Olímpicos que Brasil organizará en agosto del 2016”.
Este es el caso de Pablo Carrera. El bilbaíno llega a esta primera edición de los Juegos Europeos sin tener garantizada su presencia en la cita olímpica, por lo que realizar un papel notable es fundamental para el tirador: “Mi deseo es meterme en las finales porque quiero intentar pillar plaza para Río y eso solo es posible quedando entre los ocho primeros clasificados. Es decir, si llego hasta la final”, reconoce. Diploma en los pasados Juegos de Londres, Carrera admite viajar a Bakú “un poco cansado, arrastrando ya el final de temporada”, pero con la intención de “hacerlo lo mejor posible”.
Caso diferente es el de Maider Unda. La luchadora alavesa es la máxima representante vasca en estos Juegos, al menos en cuanto a currículo se refiere. Bronce en Londres y en el Mundial de 2009, la plata en el Europeo de 2013, y otros dos terceros puestos en los campeonatos continentales de 2010 y 2012, además de 14 campeonatos de España, son los trofeos que luce en sus vitrinas personales. De esta forma, la luchadora viaja a Bakú con la intención de probarse, de intensificar sus entrenamientos de cara al Mundial que tendrá lugar en Las Vegas el próximo septiembre: “El objetivo es llegar a la cita mundialista en el mejor momento de forma posible”, explica. Tras dar a luz a su primer hijo hace apenas un año, la gasteiztarra tuvo que cambiar de categoría -ahora compite en -75 kilos- por lo que la adaptación y recuperar la forma física perdida, son los propósitos más cercanos de la luchadora.
edición experimental Los Juegos Europeos que se celebran en Azerbaiyán serán los primeros de muchas ediciones, por lo que la organización ya ha afirmado que serán toda una prueba. Una cita experimental sobre la que mejorar las siguientes. A pesar de todo, esta nueva competición internacional ha tenido bastante buena acogida entre los deportistas vascos, sobre todo al celebrarse siempre en año preolímpico: “Los Juegos Europeos están bien como campeonato, América y Asia tenían los suyos y es interesante también poder competir a nivel continental. Al fin y al cabo, Europa era el único continente sin sus Juegos y era cuestión de tiempo que surgiera un evento de estas características”, explica Pablo Carrera. Sin embargo, el tirador bilbaíno reconoce que esta primera edición se ha confirmado de una forma “un poco brusca”: “Ha sido todo muy drástico porque en mi deporte, por ejemplo, han metido modalidades nuevas un poco con calzador. En tiro sin ir más lejos han puestos una prueba por equipos. Entonces, los deportistas tendremos que sopesar si nos sale rentable competir en ellas”, afirma.