MÁLAGA. Respeto, mucho respeto de ambos equipos al comienzo del encuentro. El Málaga le dio el balón al conjunto rojiblanco y en una primera aproximación, Fernando Torres se entretuvo dentro del área pequeña y Roberto Rosales le quitó el balón, aunque el delantero pidió penalti.

El equipo malagueño, pasados los primeros minutos de incertidumbre y posicionamiento, inició la carga hacia la portería de Oblak, aunque sin mucho convencimiento. El Atlético de Madrid dominaba, pero sin peligro.

Los minutos transcurrían sin apenas intervenciones de ambos porteros, tanto Kameni, por el Málaga, como Oblak, por el Atlético de Madrid. Lo único que era de resaltar era la velocidad y las ganas del delantero malaguista Nordin Amrabat.

Y cuando el partido estaba tranquilo, un saque de banda con el que el exjugador malaguista Gámez colocó el balón en el área pequeña del Málaga rompió el encuentro. A Kameni se le escapó el balón y Griezmann lo empujó en la línea de gol.

El Málaga, romo en ataque y con miedo, acusó el golpe, y el Atlético de Madrid se puso manos a la obra para sentenciar el duelo.

Aún así, el conjunto malagueño cogió aire y en varias acciones a balón parado se acercó al empate, que llegó en el minuto 37 tras un saque de esquina desde la izquierda lanzado por Recio. El balón lo tocó suavemente Fernando Torres y Oblak no lo pudo atajar.

El Málaga buscó con ímpetu el segundo gol con centros al área, velocidad por las bandas y el desborde de Amrabat, ante un Atlético de Madrid que se diluyó por completo en la recta final de la primera parte.

El Málaga apretó en el comienzo de la segunda frente a un Atlético de Madrid algo relajado.

Un centro de Amrabat al que no llegó por centímetros Juanmi, y tampoco Castillejo, en el área pequeña, fue un aviso para el conjunto rojiblanco, que pudo marcar a la contra en una jugada que inició Griezmann, continuó Torres y terminó Koke con un remate de cabeza que salió fuera.

El encuentro entró en una espiral con ocasiones de gol en ambas áreas. Fernando Torres pudo adelantar a su equipo con un remate de cabeza y otro disparo suyo, raso, lo sacó Kameni con la pierna derecha.

El Málaga se adelantó en el marcador en el minuto 71 tras un gran pase de Amrabat a Samu García, que, ante la salida de Oblak, le elevó el balón.

El Atlético no se rindió y logró el empate definitivo por medio de Griezmann, en posible fuera de juego. El francés aprovechó un centro desde la izquierda para batir a Kameni con un potente disparo muy cerca de la portería local.

Saúl tuvo el 2-3, pero intervino Kameni, al igual que Oblak a tiro de Amrabat en los últimos instantes del duelo.