Duración: 1h 01:08 minutos de juego; 20:21 minutos de juego real.
Saques: 3 de Bengoetxea VI (tantos 9, 10 y 21) y 3 de Urrutikoetxea (tantos 8, 12 y 20).
Faltas de saque: Ninguna.
Pelotazos: 440 pelotazos a buena.
Tantos en juego: 11 de Bengoetxea VI, 2 de Untoria y 10 de Urrutikoetxea.
Errores: 5 de Bengoetxea VI, 4 de Untoria, 1 de Urrutikoetxea y 4 de Beroiz.
Marcador: 3-1, 3-3, 4-6, 6-6, 6-7, 7-8, 7-9, 8-9, 13-10, 13-13, 14-13, 15-14, 17-15, 18-16, 18-17, 18-18, 19-21, 21-21 y 21-22.
Botilleros: Sin botilleros, al tratarse de un enfrentamiento entre dos parejas de la misma empresa, Asegarce.
Apuestas: De salida se cantaron posturas de 100 a 80 a favor de Bengoetxea VI-Untoria.
Incidencias: Partido correspondiente a la duodécima jornada de la liguilla de los cuartos de final del Parejas de Primera de la LEP.M disputado en el frontón Astelena de Eibar. 200 espectadores.
eibar - Fue un saque-remate, un gancho, que no podía alcanzar ni Mikel Urrutikoetxea ni Usain Bolt y que acabó pisando tablas. Fue cuestión de centímetros. Fue cuestión de suerte. Fue otro partido que se le escapó a Oinatz Bengoetxea por un remate fallido en el momento determinante, como el del Beotibar ante Artola-Albisu. En Tolosa fue una chapa. Ayer, un gancho que se escapó por poco. Un gancho que no era para hacer prisioneros: morir o matar. Honestidad pura y dura la del leitzarra, que cuajó un partido grande en el Astelena y tiró de galones. El punto estaba en el remate y en su ecuación, con 21 iguales, no entraba la defensa. Se arriesgó. Salió cruz. Así, Oinatz y Aretxabaleta, reemplazado por Untoria en Eibar, siguen con posibilidades de semifinales, pero lo tienen muy complicado. Ahora sí que tienen que ganar los dos encuentros que les quedan y que ni Artola-Albisu ni Irujo-Barriola sumen más. Es decir, que los guipuzcoanos y los navarros dependen de sí mismos: con un punto más están en semifinales. Ese remate con el empate a 21 fue el fin de un encuentro en el que destacaron los dos delanteros. Bengoetxea VI asumió su rol de rematador con un Untoria aseado, pero la versión de Mikel Urrutikoetxea fue para quitarse el sombrero. Genio. El delantero zaratamoztarra cuajó números importantes, pero las matemáticas no tienen alma y su esencia quedó impresa en un encuentro en el que casi dobla a pelotazos a su compañero Beroiz. Urruti, carnívoro, pura ambición, está un nivel gigantesco. De este modo, en un duelo de artistas, las igualadas fueron constantes y la mayor emoción se alumbró en un final de partido intenso. Una alcanzada de Untoria en un tanto revuelto puso el 18-16, que acabó trasformándose en un 18-21 por virtud del volcán Urruti. Igualó Oinatz con genio. 21-21. Y en el saque-remate... Mala suerte.