Vitoria - La competición en Tercera Divisón comenzó el pasado fin de semana su segunda vuelta y los cuatro equipos alaveses en esta categoría pelearán hasta el final de la temporada para cumplir sus respectivos objetivos. Así, mientras que Alavés B y Aurrera se encuentran cómodamente asentados en la zona tranquila del Grupo Vasco, el Amurrio buscará una reacción que le evite el descenso en este mismo lote, mientras que en el Grupo Riojano la aspiración de la Oyonesa es no pasar excesivos apuros para salvarse.

Empezando por el filial alavesista, la mala racha en los últimos partidos ha impedido que el equipo de Roberto Ochoa mantenga opciones de repetir la clasificación para el play off de ascenso que consiguió la pasada campaña. El objetivo de este equipo es la formación de jugadores para surtir de canteranos al primer equipo, pero es evidente que a todos les gusta estar arriba. Tras haber ganado solo un partido de los últimos siete, los albiazules se han visto descabalgados de la zona de privilegio.

En el aspecto positivo del equipo hay que destacar la recuperación de un Sergio Herrera que vivió un año muy duro en el Laudio sin apenas jugar y que vuelve a dar sensación de apuesta sólida de futuro, siendo el tercer guardameta menos goleado del grupo. La misma línea de crecimiento que evidencia Julen Lafuente, que ya brilló en la pretemporada con el primer equipo y que es el motor del filial en el centro del campo, o la eficacia en punta de Asier Benito, máximo goleador con ocho tantos.

Justo por detrás del filial alavesista se encuentra en la clasificación un Aurrera que ya ha recorrido una buena parte del camino hacia la permanencia en la categoría. En su regreso a Tercera, el cuadro rojillo apenas ha sufrido y maneja una renta de 14 puntos con respecto a la zona de compromiso. En sus primeros partidos, el equipo entrenado por Rubén López Tato tuvo ciertos problemas, pero lo cierto es que su capacidad para sacar victorias con cierta regularidad le ha permitido conseguir un colchón de puntos muy cómodo y muy mal lo tienen que hacer para verse en apuros en esta segunda parte del curso.

Como nota destacada del Aurrera, sus dos delanteros de referencia. Jon Ander Pérez es el tercer mejor artillero del grupo gracias a sus once dianas y se ha encontrado muy bien acompañado por Iker Arroyo (cinco).

Si Alavés B y Aurrera representan la tranquilidad, donde están instalados los problemas es en Amurrio. Con solo 13 puntos en su casillero, el equipo del valle de Aiala se cuentra a nueve del Santutxu, que es el que en estos momentos marca la línea de la salvación. El equipo de Edu Carrera tiene problemas de todo tipo, pero el más grave en estos momentos es su fragilidad defensiva. De esta manera, los amurrioarras son los más goleados del grupo con 38 tantos encajados, una sangría que hay que parar en la segunda vuelta para tener opciones de salvar la categoría por segunda campaña consecutiva.

En la zona baja, en su caso del grupo Riojano, se encuentra también una Oyonesa que está rindiendo bastante por debajo de lo que se esperaba al principio del curso. El equipo alavés se ha acostumbrado en su etapa reciente a ser uno de los equipos punteros del grupo y se encuentra mucho más cerca de los puestos de peligro que de la zona de privilegio. Sus problemas de cara a la portería rival están siendo importantes, pero tampoco en defensa está funcionando la Oyonesa al mismo nivel que en cursos precedentes.