madrid - La selección de Irán afronta hoy (18.00 horas, Gol TV) su última oportunidad de certificar su pase a los octavos de final, para lo que deberá derrotar a Bosnia-Herzegovina y esperar una derrota de Nigeria ante Argentina. Con sólo un punto en dos partidos, el cosechado en su debut en Brasil tras el empate sin goles frente a Nigeria, el conjunto iraní buscará un triunfo que le dé opciones de estar en la siguiente ronda. El combinado dirigido por Carlos Queiroz se ha mostrado como un duro bloque difícil de batir, como muestra el único gol recibido en el balance de goles encajados.

La selección iraní se ha enfrentado en cinco ocasiones a Bosnia desde que juega como un país independiente, anotando un total de 16 goles y llevándose la victoria en cuatro partidos.

Por su parte, el combinado bosnio no tiene grandes motivos para pensar en un resultado positivo para sus intereses. Los hombres de Safet Susic, ya eliminados después de dos derrotas, intentarán despedirse con una victoria de su primera cita mundialista a la que llegaban con más expectativas.

El seleccionador bosnio no hará experimentos en su once y continuará confiando en sus jugadores de garantías, entre los que destacan el centrocampista de la AS Roma, Miralem Pjanic, y el delantero del Manchester City, Edin Dzeko. - E.P.