neuchatel - El viernes los Alpes amanecieron invisibles, escondidos detrás de las nubes, grises, húmedos y fríos. De ahí, aunque sea metafóricamente, venía Chris Froome. De una época opaca; de la renuncia en la Tirreno-Adriático; de la reaparición en la Volta en la que hincó la rodilla ante Purito, Contador y Quintana, los tres a los que dominó el pasado julio en el Tour; de una nueva incomparecencia en la mañana de la Lieja-Bastogne-Lieja donde estaba prevista su reaparición. ¿Cómo sería el Froome del Tour de Romandía? Para contestar a esa pregunta, Vincenzo Nibali, que corre a su encuentro con el Tour tras desechar el Giro, quiso ver qué había detrás de las nubes que cubrían el viernes los Alpes. Fue el primero en atacar en el último puerto de la etapa reina, Villars-sur-Ollon. "No creía que Froome estaba tan fuerte", dijo luego. Esa era la respuesta.

El keniano respondió a Nibali, le dejó tirado, esperó después a Simon Spilak y dejó el Tour de Romandía casi sentenciado a falta de la última crono, tras ceder en la lucha por la etapa y quedarse a un segundo del esloveno en la general.

Ese segundo se lo comió ayer Froome en cuatro pedaladas sobre los 18 kilómetros de contrarreloj en Neuchatel. Le sacó 29 a Spilak. "Ha ganado el más fuerte", se rindió el esloveno. Ese fue inglés. Más fuerte que Spilak para repetir el triunfo de hace un año en el Tour de Romandía que le condujo, meses después, al Tour. Más fuerte incluso que Tony Martin, el tanque, para ganar también, sueltos los caballos, la contrarreloj que acaba por disipar cualquier duda sobre su condición física, extraordinaria, y confirma que su camino hacia el Tour es el correcto. "Ahora sé que estoy a tiempo para el Tour", asegura el inglés. Más dudas debe tener Nibali, 18º ayer y quinto en la general. Y muchas más de cara al Giro Ivan Basso, 76º en la crono y 41º en la general. "No levanto cabeza", lamentó el italiano.

Tampoco acaba de rematar Beñat Intxausti, notable en la etapa reina del viernes, que acabó sexto tras la crono pero a 20 segundos del podio que ocupó Rui Costa. Brillante en el ejercicio individual volvió a estar Jon Izagirre, que fue quinto. - A. Laiseka