Vitoria. Josu Larreategi fue, en su día, un hombre de la máxima confianza de Josean Querejeta. Hasta el punto de que el murgiatarra tuvo hace años un encargo muy particular por parte del presidente baskonista cuando desempeñaba la tarea de entrenador ayudante en el club vitoriano. En compañía de José Ángel Samaniego, actual mano derecha de Salva Maldonado en el Joventut y en su día miembro del staff técnico azulgrana, Larreategi se desplazó hasta París para conocer en primera persona la metodología de Dusko Ivanovic.

Querejeta había recabado excelentes informes de un técnico montenegrino que había despuntado en Suiza y, más tarde, en el Limoges. Para cerciorarse de que su apuesta para el banquillo en sustitución del argentino Julio Lamas era la idónea y antes de iniciar con su agente las conversaciones que dieran con los huesos del sargento de hierro balcánico en Vitoria, el presidente baskonista quiso que dos de sus trabajadores se entrevistaran en primera persona con el de Bijelo Polje con el fin de conocer sus inquietudes, su forma de ver el baloncesto y su personalidad.

Larreategi y Samaniego compartieron mesa y mantel junto a Ivanovic en un restaurante ubicado dentro del aeropuerto Charles de Gaulle. Tras esa comida, ambos recabaron una excelente impresión y se percataron de que era la persona ideal para llevar las riendas del Baskonia. Una vez informado de la bondades de Ivanovic, Querejeta intensificó los contactos para incorporar al que, hasta la fecha, ha sido de largo el preparador más exitoso de la historia del club alavés.