Bilbao. El dedo índice de la mano derecha de Juan Martínez de Irujo le lleva por la calle de la amargura desde que comenzó su participación en el Cuatro y Medio. En el envite estelar de parejas del festival que abrió los octavos de final de la competición en Elizondo, el iberoarra en una alcanzada se dio un golpe que ha mediatizado toda su participación en la jaula. Apenas unos días después ya tenía que afrontar su primer envite, nada menos que ante Aimar Olaizola, por entonces Juan solicitó un aplazamiento dada la fisura que le paraba su progresión al castigar con el saque y al golpear con la diestra. La Liga de Empresas le denegó tal posibilidad dado que "el reglamento no contempla la petición y concesión de aplazamientos de partidos en la liguilla de cuartos de final", excepto "que la nueva fecha sea previa al inicio del primer partido de la siguiente fase o jornada, que no lleve aparejada la modificación de las fases o jornadas siguientes o que permita que los pelotaris dispongan de un tiempo de recuperación suficiente antes del partido que deban disputar en la siguiente fase o jornada".

Una vez eliminada cualquier posibilidad de parar para recuperarse, el rumbo de Irujo ha sido complicado. Le cuesta empezar los partidos tranquilo y su clasificación en semifinales ha estado cargada de dudas, casi todas derivadas de su derecha. Al fin y al cabo, el delantero navarro no tiene tiempo material para entrenarse con garantías. Preservar el dedo de su mano índice conlleva no poder ejercitarse con la derecha y en los partidos de Xala y Ezkurdia ha acabado tocado. Contra el lapurtarra aguantó el tirón al inicio sin mostrar sus armas y el miedo le agarrotó; mientras que contra el de Arbizu ni siquiera se puso taco en diestra en la elección de material para evitar cualquier golpe. Así las cosas, al término del encuentro, que ganó in extremis y con sensaciones malas, explicó que "cuando voy a restar estoy más pensando en el dedo que en el tanto, piensas si en la lesión va a ir a más, si se va a acabar el dolor".

De modo que la cosa no ha ido a mejor. Ahora, el delantero sí tiene oportunidad de aplazamiento, por lo menos de una semana según el reglamento del Cuatro y Medio. Así las cosas, la semifinal prevista entre Irujo y Oinatz Bengoetxea para el domingo en el frontón Bizkaia de Bilbao podrá verse retrasada según las sensaciones de Juan hoy. El iberoarra probará a primera hora en Mutilva y después tomará la decisión correspondiente, pero, tal y como han sucedido las cosas, lo más normal es que pida una semana de prórroga que trastoque el calendario del campeonato, cuya final es el 8 de diciembre, en principio.

olaizola y Saralegi, al labrit Aimar Olaizola y Ekaitz Saralegi se cruzan en la primera semifinal el sábado en el Labrit de Iruñea.