Londres. Al entrar en Freemason´s Arms, uno se encuentra una mezcla entre turistas que descansan tras un ajetreado día conociendo monumentos londinenses que, cerveza en mano, siguen con atención las retransmisiones deportivas en las numerosas pantallas de televisión que posee el local. Estamos en Covent Garden, en la calle Long Acre, uno de los epicentros turísticos de Londres. Sin embargo, una medalla conmemorativa y algunas fotografías antiguas nos indican que éste no es un pub más de la capital inglesa. Nos encontramos en la cuna del fútbol tal y como hoy lo conocemos, el lugar de nacimiento de la Football Association (FA) y de las primeras 14 reglas del fútbol moderno. En el otoño de 1863, varios clubes de la época se dieron cita en Freemason´s, en seis reuniones que pusieron los cimientos del que, 150 años después, es el deporte más popular del mundo.
Y es que Freemason´s no era un sitio cualquiera en aquel Londres industrial de mediados del siglo XIX. El actual mánager del local, Jonathan Annetts, cuenta que "era un lugar exclusivo, donde se reunían las mentes pensantes de aquella época". En sus lujosos salones privados se debatían asuntos de vital importancia para el devenir de Inglaterra y, por extensión, del mundo, ya que Londres era la capital del poderoso Imperio Británico y la ciudad más poblada de Occidente. Además de la FA y las reglas del fútbol, Freemason´s presume de ser el lugar de creación de, entre otras, la Sociedad Geológica en 1830, si bien los historiadores no pueden confirmar este dato.
El fútbol primitivo, jugado en Inglaterra por la plebe desde la Edad Media, cautivó a la aristocracia en el siglo XIX. Conscientes de la importancia del ejercicio físico, los exclusivos internados para los hijos de las clases altas introdujeron con éxito la práctica del fútbol, si bien cada escuela tenía sus propias reglas. Cuando en 1848 la universidad de Cambridge publicó un reglamento para que sus alumnos, procedentes de diversos colegios, tuvieran un estilo unificado, apareció la preocupación por codificar el fútbol con leyes universales. La fundación de los primeros clubes (como el Sheffield FC en 1857), no hizo sino incrementar esa necesidad. Hay que tener en cuenta que, a diferencia del cricket o el remo, el fútbol atraía a ricos y pobres por igual.
En 1862, Ebezener Cobb Morley, del Club Barnes, propuso en el periódico Bell´s Life una asociación que unificara a todos los clubes y publicara unas reglas que todos deberían respetar. Un año después, cuando su sueño se hizo realidad en el pub Freemason´s, el propio Morley fue nombrado secretario de la FA. El primer reglamento está escrito de su puño y letra, firmado por él en diciembre de 1863. En realidad, la fundación de la federación de fútbol, la FA, se resolvió con celeridad. Nació el 26 de octubre, día de la primera reunión en Freemason´s, con doce clubes como miembros fundadores.
Sin embargo, una vez creada la FA, redactar las reglas del fútbol resultó ser una tarea mucho más complicada. De hecho, fue en aquellas reuniones de finales de 1863 cuando se produjo la división entre quienes preferían un fútbol basado en el dribbling y quienes abogaban porque el jugador pudiera desplazarse con el balón en las manos. Estos últimos eran favorables a permitir agarrones y patadas al rival. 150 años después, estas dos ideas contrapuestas siguen sin reconciliarse, con el fútbol y el rugby como herederos de una y otra. El cisma definitivo se produjo en la última reunión celebrada en Freemason´s Tavern, en una votación que los defensores del dribbling ganaron por trece votos a cuatro. Liderados por el club Blackheath, varios representantes se rebelaron contra la nueva normativa que les impedía derribar al rival o correr con el balón en las manos. Según las crónicas de la época, F.W. Campbell, representante del Blackheath, defendió muy airadamente que "el verdadero fútbol consiste en golpear al rival, así ha sido hasta ahora y nadie tiene derecho a prohibirlo mediante nuevas reglas". Argumentando que "la nueva normativa favorece a quien prefiere beber y charlar en vez de la hombría de nuestro juego", el Blackheath abandonó la reunión. De este club y algún otro nunca más se supo en la FA. En 1871, el Blackheath participó en las reuniones que dieron origen al rugby, deporte que aún hoy en día practica, en la tercera división inglesa.
El 8 de diciembre de 1863, las reglas del fútbol vieron la luz, bajo el título The Laws of the game. Con los pies, se podía golpear la pelota, pero no al rival; con las manos, no se podía agarrar ni al rival ni la pelota. El fútbol moderno ya era una realidad. A pesar de que, sobre todo en el norte del país, se usaban ocasionalmente otras reglas, la normativa de la FA se difundió con rapidez, mientras que los clubs asociados a la Football Association pronto se extendieron por toda Inglaterra y Escocia. La FA había previsto el primer partido de demostración de acuerdo a las nuevas reglas para principios de 1864, pero tal era la expectación del público, que el 19 de diciembre de 1863 se programó un encuentro entre el Barnes y el Richmond, que terminó con empate a cero. El fútbol unificado propició la organización de campeonatos entre clubs, como la FA Challenge Cup, la célebre copa inglesa, que se disputa desde 1871, siendo el torneo futbolístico más antiguo del mundo.
Entretenimiento global Tras las reuniones del pub Freemason´s, el fútbol inició el camino para convertirse en un entretenimiento global, que apasiona a millones de personas en los cinco continentes y mueve fortunas inimaginables para aquellos pioneros que practicaban el fútbol por pura diversión. Esta pasada primavera, numerosos representantes de la FIFA se reunieron en Freemason´s en un acto conmemorativo. El gerente de este pintoresco pub londinense explica que al menos una docena de televisiones de todo el mundo les han visitado este año, "la verdad es que es bonito saber que el local forma parte de la historia".