Madrid. El español Marc Márquez (Repsol Honda) abogó en la jornada de ayer por dejar "atrás" el error cometido en Australia, que le costó la descalificación y permitió que se le acerque en la clasificación de MotoGP Jorge Lorenzo, y centrarse ya en el Gran Premio de Japón, que se disputará el domingo en Motegi y donde de nuevo cuenta con la opción de proclamarse campeón de la categoría en la temporada de su debut en la misma.
"Obviamente estoy decepcionado después de Phillip Island, pero estas cosas pueden pasar. Lo importante es que una vez más demostramos que estábamos listos para la carrera y éramos competitivos. Ahora debemos dejarlo atrás y concentrarnos en Motegi", afirmó el catalán.
El joven piloto, que vuelve a tener la oportunidad de ganar el Mundial el año de su estreno, señaló que "las condiciones de la pista pueden variar bastante" y se concentrará "en la puesta a punto para las fuertes aceleraciones y frenadas, que es un aspecto que ahora hemos mejorado" y que sin duda tendrán una notable importancia en esta penúltima carrera de la temporada.
"Trabajaremos duro desde el principio, siguiendo nuestra planificación habitual y daremos el cien por cien para recuperarnos después de Australia", señaló Marc Márquez.
Su compañero Dani Pedrosa, tercero en la general del Mundial, admitió por su parte que "la de Australia fue una carrera extraña" pero está "realmente contento" con el equipo, "que hizo un gran trabajo" y logró el segundo puesto.
"Siempre tengo ganas de ir a Motegi, es una gran carrera para Honda y disfruto en el circuito. Es la última carrera de las tres de la gira y todos estamos cansados, así que es importante mantener la concentración", declaró Pedrosa, ganador en Japón las dos temporadas anteriores, que también consideró importante "encontrar una buena puesta a punto para conseguir estabilidad a la hora de frenar y una buena tracción en la salida de las curvas".