BILBAO. Al abrigo de la Fundación Ciclista Euskadi, creada en junio de 1993 por Miguel Madariaga, auténtico 'alma mater' del equipo hasta 2012, y el entonces diputado general de Bizkaia, José Alberto Pradera, el equipo Euskadi salió a la carretera en 1994 bajo la batuta de Txomin Perurena.

El ya fallecido Agustín Sagasti le dio a la escuadra vasca su primer triunfo en el sector matinal de la quinta etapa de la Vuelta al País Vasco de aquel año inaugurando un brillante palmarés de más de 150 victorias labradas en carreras como el Tour de Francia (3), el Giro de Italia (3) o la Vuelta a España (12).

El todavía 'solo' Euskadi estuvo a punto de desaparecer en 1997 por problemas económicos, pero la entrada como patrocinador del operador telefónico Euskaltel a mediados de ese año y de Julián Gorospe como director deportivo en 1998 marcaron el definitivo repunte del equipo.

En 1999, Roberto Laiseka logró en Abantos el primer triunfo de etapa en una 'grande' y un año más tarde el vizcaino repetiría en Arcalís. En 2001, ya con su característico jersey naranja, Laiseka volvió a hacer historia al alzar los brazos en Luz Ardiden en la primera participación del Euskaltel en el Tour.

Desde ese año, los miles de aficionados que cada mes de julio han formado la 'marea naranja' en los Alpes y, sobre todo, los Pirineos han sido una de las imágenes clásicas de la ronda gala e incluso en uno de los más reconocidos 'embajadores' de la marca 'Euskadi' en el mundo.

En 2005, Igor González de Galdeano inició su primera etapa directiva en el Euskaltel como adjunto de Miguel Madariaga y la escuadra siguió progresando con líderes como Samuel Sánchez, Igor Antón o Mikel Nieve.

El ovetense, criado deportivamente en la comarca vizcaina de Enkarterri, conseguiría su éxito más relevante al colgarse la medalla de oro en la prueba en ruta de los Juegos Olímpicos de Pekín de 2008.

El asturiano lograría después una etapa del Tour en Luz Ardiden y subiría además al podio del Tour como rey de la Montaña en un 2011 que fue el último gran año del Euskaltel gracias también a los triunfos de Mikel Nieve e Igor Antón en el Giro y del escalador vizcaino en la etapa de la Vuelta con final en Bilbao.

En 2013, con el cambio de reglamentación de la UCI, González de Galdeano, ya como máximo responsable del equipo tras la salida de Madariaga, tomó la decisión de dar un giro a la filosofía del equipo y fichar corredores extranjeros para sumar los puntos necesarios que le garantizaran una plaza en la máxima categoría del ciclismo.

Esta arriesgada decisión no ha tenido los frutos deseados y el final de las ayudas económicas institucionales unidas a la imposibilidad de que Euskaltel encontrara un compañero de viaje para poder sustentar el proyecto han terminado por sepultar dos décadas de una manera muy especial de entender el ciclismo profesional.