Vitoria. Después de las incorporaciones de Daniel Medrano y el eslovaco Peter Krsjak, el Hielo Bipolo comunicó ayer su tercer fichaje de cara a la ilusionante temporada 2013-14 donde será el rival a batir tras el primer título liguero de su historia. Se trata del defensa sueco Joakim Engström, que viene con la intención de fortalecer la línea defensiva. Nacido en Estocolmo (Suecia) el 15 de noviembre del 1989, se caracteriza por su fortaleza física, merced a su 1,91 metros de estatura y sus 92 kilos de peso, que avalan su potencial en las labores de destrucción.
Formado en las categorías inferiores del IFK Täby de su ciudad natal, continuó su aprendizaje en la ciudad de Dalarna. Llegado el ejercicio 2009-10, Engström dio el salto al extranjero para competir en una liga diferente, concretamente en la española. Lejos ya del frío de su país natal, en ese año fue fichado por el FC Barcelona, donde ha desarrollado su juego las últimas cuatro campañas, siendo uno de los defensas más destacados de la Liga Nacional de Hockey Hielo (LNHH). No en vano, en su etapa en la Ciudad Condal y a pesar de ser un defensa nato, ha logrado unos más que notables números en cuanto a goles y asistencias se refiere.
El potente defensa sueco se define a sí mismo como un trabajador honesto y fiel a su línea defensiva pero con esporádicas llegadas hasta línea azul de ataque, donde su fuerte disparo goza de notable efectividad. Además, pese a su sacrificado rol, Engström también se caracteriza por ser un jugador muy útil para llevar a buen puerto las superioridades numéricas (powerplay), aspecto que el entrenador de Hielo Bipolo, Ramón Barón, quiere mejorar de cara al nuevo curso que comenzará en apenas un mes.
De esta manera, fichaje a fichaje se van vislumbrando las intenciones de la dirección deportiva del club gasteiztarra, quien a la vista de que durante la campaña pasada mostró cierta debilidad en la retaguardia ante rivales poderosos como el Jaca o el Puigcerdá ha querido cubrir ahora las espaldas de la escuadra con la adquisición de un incuestionable poderío ofensivo.