charleroi. Jordi Bertomeu baraja nuevos cambios para la próxima edición de la Euroliga. El director ejecutivo de la mejor competición continental de club medita la idea de que los ocho equipos que sean eliminados en la primera fase no se queden a las primeras de cambio sin disputar partidos europeos. Para ello, tiene bastante perfilada la idea de que se reenganchen a la Eurocup con el fin de que esta adquiera mayores alicientes. Se trata del mismo planteamiento que rige desde hace años en el fútbol, cuando aquellos conjuntos que quedan fuera de la Liga de Campeones en la primera fase pasan automáticamente a disputar la Liga Europa.

De esta manera, si algún grande del Viejo Continente no cumple con el objetivo mínimo de acceder al Top 16 -como le sucedió al Baskonia la pasada campaña-, se conformará con un premio menor como es tomar parte en el segundo torneo continental, donde el nivel de los participantes deja en muchos casos bastante que desear. Este cambio no tiene todavía el rango de oficialidad, pero fue deslizada por el propio Bertomeu en Charleroi (Bélgica) durante la celebración de la reciente final de la Eurocup entre el Lokomotiv Kuban y el Bilbao Basket, conquistada por un cuadro ruso que ya ha obtenido el pasaporte para tomar parte en la próxima edición de la Euroliga.

Bajo el formato actual, 16 de los 24 participantes acceden a la segunda fase mientras que ocho quedan eliminados tras una primera fase en la que se configuran cuatro grupos de seis conjuntos cada uno. La última modificación introducida por los rectores se produjo para este mismo ejercicio cuando decidió que el Top 16 estuviese conformado por dos lotes de ocho equipos cada uno.