FUENLABRADA Valters (9), Feldeine (9), Cortaberría (8), Kurz (19), Sené (6) -quinteto inicial-, Mainoldi (-), Vega (2), Sánchez (8), Gladyr (14) y Colom (9).
VALLADOLID Cizauskas (-), Grimau (6), Montañez (15), Martín (13), Sinanovic (11) -quinteto inicial- Porta (13), Izquierdo (-), Ruiz (-), Navarro (9) y O'Leary (7)
Parciales 26-15, 14-15, 18-19, 26-25.
Árbitros Hierrezuelo, Jiménez y Sacristán. Eliminaron a Cortaberría (m.35), del Fuenlabrada.
Pabellón Polideportivo Fernando Martín (4.702 espectadores).
fuenlabrada. Necesitaba angustiosamente un triunfo el Mad-Croc Fuenlabrada después de encadenar dos derrotas consecutivas que lo situaron en la zona de descenso e hicieron soñar al Lagun Aro. Y lo consiguió ayer ante el Blancos de Rueda Valladolid (84-74), en un encuentro en el que brilló especialmente el ala-pívot estadounidense Robert Kur con 19 puntos.
Fiel a lo repetido por el técnico fuenlabreño, Trifon Poch, en el transcurso de la semana, entró el equipo naranja muy motivado en el partido, con una marcha más que el Valladolid, que no encontraba la forma de frenar las embestidas de los madrileños. El parcial de 11-2 en los minutos iniciales daba idea del tipo de camino que tenía en mente el Fuenlabrada: agresivo en ataque y aguerrido en defensa. La gran superioridad reboteadora de los locales (20 del Fuenlabrada por 12 del Valladolid) y las segundas jugadas permitieron a los madrileños mantener la diferencia a lo largo de la confrontación.