Madrid. Alberto Contador (Madrid, 1982) ha abierto una nueva vía para ampliar su palmarés tras ganar por primera vez como profesional una carrera programada a un solo día, la Clásica Milán-Turín, una prueba que desapareció en el año 2008 del calendario y que regresó ayer con triunfo español.
"Es una victoria para Víctor Cabedo, allá donde esté", dijo el español acerca de su compatriota y malogrado ciclista del Euskaltel fallecido hace una semana, al ser atropellado cuando se entrenaba en carretera.
Contador (Saxo Bank-Tinkoff Bank) pensó en Cabedo nada más levantar los puños en señal de victoria mientras dirigía la mirada al cielo de Turín. El madrileño, uno de los mejores ciclistas del siglo XXI, cruzó en primer lugar la línea de meta de una carrera que data del siglo XIX.
La Clásica que une Milán y Turín, la más antigua de Italia cuya primera edición se disputó en el siglo XIX (1872), reapareció con el triunfo de un especialista en carreras por etapas. Contador, por fin, obtuvo premio en las pruebas que se desarrollan en un solo día. El madrileño, de 29 años, ganó en un final en alto, cerca de la Basílica de Superga, y tras un ataque fortísimo en el último de los 195 kilómetros de que constaba la prueba.
El reciente ganador de la Vuelta a España sacó toda su potencia en la segunda ascensión al Colle di Superga. Después de un gran trabajo de equipo, Contador logró despegarse del italiano Diego Ulisi, gracias a un ataque feroz en los últimos 1.000 metros de un final de carrera con rampas de hasta el 10 por ciento de desnivel y de 5 kilómetros de continuada ascensión.
Contador alzó los brazos en este lugar emblemático, donde sólo había llegado antes una gran carrera, la cuarta etapa del Giro de 1958, que ganó precisamente otro español: Bahamontes. Ulisi (Lampre) cruzó la línea de meta a 15 segundos del ciclista madrileño, el sueco Fredrik Kessiakoff (Astana) llegó tercero a 24 segundos y otro español, Joaquim Purito Rodríguez (Katusha) concluyó en la cuarta plaza con el mismo tiempo que el colombiano Carlos Betancur.