DONOSTIA. Llorente, que no entraba en los planes del técnico realista Philippe Montanier, volverá a coincidir con quien fue su gran valedor, Jose Luis Mendilibar, preparador osasunista, y mañana se ejercitará ya con el conjunto rojillo.

"Tiene un montón de delanteros (Montanier) y yo no soy de su gusto. No tengo problemas con él y mi relación es normal, aunque tiene sus preferencias y yo no entro en ellas", ha declarado Llorente, que está "seguro" de que volverá a tener otra oportunidad en la Real.

Llorente cree que la cesión es "la mejor opción para todas las partes" y ha agradecido a Montanier su franqueza al adelantarle que tendría pocas opciones de jugar esta temporada.

El futbolista de Hondarribia espera "estar a gusto" en Pamplona y "volver con más fuerzas" para cumplir el año de contrato que le resta con la Real.

Ha recordado que en los dos partidos en los que tuvo minutos la pasada temporada, Granada y Espanyol, estuvo a un nivel competitivo que le satisfizo.

Llorente ha hecho balance de las dos temporadas que ha jugado en la capital guipuzcoana, ha recordado que le condicionó el parón al que le obligó su larga lesión y opina que no ha fracasado y que no ha sido culpa suya no haber estado a la altura de las expectativas que generó su contratación.