Londres. Los clubes de la Liga inglesa han desembolsado este verano un total 485 millones de libras (547 millones de euros) en fichajes, calculó que realizó ayer la consultora Deloitte, después del cierre anoche del mercado. El equipo que más se reforzó en el último momento fue el Arsenal de Arséne Wenger, que después de un mal comienzo de Liga y de vender a dos de sus principales estrellas, el español Cesc Fábregas y el francés Samir Nasri, incorporó a su plantilla a dos defensas y dos centrocampistas. Pocos minutos después de cerrarse el plazo para inscribir a nuevos jugadores, los "gunners" anunciaron la llegada desde el Everton del español Mikel Arteta, el relevo de Cesc, por el que pagarán un traspaso de 10 millones de libras (11,2 millones de euros). El centrocampista, de 29 años, jugará las cuatro próximas temporadas en el equipo de Londres, según informó el club.
También sobrepasado el límite, se conoció la incorporación del israelí Yossi Benayoun, que llega cedido del Chelsea por una temporada. La llegada del centrocampista, de 31 años, estuvo facilitada por la posibilidad de que el técnico del Chelsea, André Villas-Boas, dejara a Benayoun fuera del equipo inscrito para la Liga de Campeones.
De nuevo, los "gunner" contrataron al brasileño Andre Santos, procedente del Fenerbahce turco, y al alemán Per Mertesacker, procedente del Werder Bremen. El Arsenal cierra el periodo de fichajes con un gasto de 51,4 millones de libras (58 millones de euros), y con unos ingresos por venta de jugadores de 74,3 millones de libras (82,9 millones de euros). El Chelsea, por su parte, completó, pocos minutos antes del límite, el fichaje del centrocampista portugués Raúl Meireles, procedente del Liverpool, por 12 millones de libras (13,5 millones de euros).