La UEFA anunció ayer la apertura de un proceso disciplinario contra el francés Arsene Wenger, entrenador del Arsenal, "por no acatar las decisiones del Comité de Control y Disciplina" del organismo en el último partido de la Liga de Campeones ante el Udinese italiano, para el que estaba sancionado. La UEFA recuerda en el comunicado que, "de acuerdo con el reglamento disciplinario", un entrenador "no puede comunicarse con su equipo durante el partido para el que está sancionado y sólo puede seguir el mismo desde la grada".