shanghai. Dos carreras, dos medallas y ninguna victoria: el balance no tiene para nada satisfecho al estadounidense Michael Phelps en el comienzo de los campeonatos mundiales de natación en Shanghai. Después del bronce en los relevos 4x100, el 14 veces oro campeón olímpico fue superado precisamente por su compatriota Ryan Lochte al llevarse la presea dorada en la final de los 200 metros libre, la primera vez que su amigo le vence en una gran competición.

"Es todo culpa mía que ya no sea tan rápido. Eso lo sé", dijo ayer Phelps, aludiendo a un 2010 en el que la natación pasó a un segundo plano y el golf se convirtió en su mayor interés. A Phelps, de 26 años, no le quedan más recursos que apretar más para los Juegos Olímpicos 2012. "Sé lo que tengo que hacer para hacer aún más excitante el año próximo", aseguró el hombre que más oros acumula en la historia olímpica.

Los ocho de Pekín son un recuerdo imborrable, pero todo indica que los rivales le perdieron el miedo a la superestrella de Estados Unidos. "Lo que ha hecho Michael ha pasado a la historia, pero de eso hace tres años. Ahora estamos en el 2011 y yo soy un mejor nadador", había dicho Lochte ya antes del primer duelo directo que ganó ayer.

Lochte (con un tiempo de 1:44,44) cumplirá 27 años el 3 de agosto. Dueño de un enorme potencial quizás afectado por su afición por la comida basura en McDonald's -en Shanghai aseguró que está comiendo menos hamburguesas-, parece estar encaminando su carrera rumbo a una gran actuación en Londres 2012.

Phelps (registro de 1:44,79), que al menos se desquitó ayer de la derrota que le infligió el alemán Paul Biedermann (autor de un tiempo de 1:44,88) en el Mundial de Roma 2009, entiende que el deporte es así. "Yo nado contra un gran número de jóvenes, pero se trata sobre todo de marcas. Y en realidad, claro, es bueno batir a alguien que ha hecho lo mismo con uno", dijo con una sonrisa.

Por otro lado, la final más curiosa del día fue la de los 100 metros espalda, en la que compartieron el oro, tras acabar con el mismo tiempo, los franceses Lacourt y Stravius, que marcaron exactamente 52,76 segundos. Tras ellos completó el podio, en tercera posición, el japonés Ryosuke Irie, en 52,98 segundos.

Por último, en la final de 100 metros espalda conquistó el oro en casa la china Zhao Jing (59,05), y fue seguida en el podio por la rusa Anastasia Zueva, plata (59,06), y por la estadounidense Natalie Coughlin, bronce (59,15), mientras que en la final de 100 metros braza ganó la estadounidense Rebecca Soni (1:05,05), con la australiana Leisel Jones en segundo lugar (1:06,25) y la china Ji Liping en el tercero (1:06,52).