Londres. Inglaterra venció a Escocia en Twickenham (22-16) y se adjudicó su 64 Copa Calcuta, en partido correspondiente a la cuarta jornada del Seis Naciones que ha colocado al XV de la Rosa a un paso del título y con la posibilidad de lograr la triple corona si vence en el último encuentro a Irlanda.
Escocia presentó un planteamiento muy serio en la Catedral del Rugby y le puso las cosas muy difíciles a los ingleses, con una defensa muy agresiva que impidió que su vertiginosa delantera pudiese ensayar en la primera parte. Guiados por Toby Flood, los ingleses buscaban darle velocidad a su juego, tratando de encontrar a Chris Ashton para finalizar las jugadas. Sin embargo, el XV del Cardo presionó bien y cerró todas las líneas.
A falta de ensayos, la primera mitad dejó el acierto de Flood a la hora de patear, logrando los nueve puntos ingleses con tres golpes de castigo. Por su parte, Escocia logró el empate a nueve justo antes del descanso con un excelente drop. En la segunda parte, el encuentro seguía en la misma línea, con el juego muy físico y poco acierto. Hasta que una polémica decisión del colegiado, que mostró tarjeta amarilla al escocés John Barclay, inclinó la balanza del lado local. Temporalmente con 14 jugadores, el conjunto de Andy Robinson buscó que pasaran los diez minutos de penalización, pero no pudo resistir la presión inglesa, que se lanzó en busca del ensayo para matar un encuentro que se había complicado más de lo previsto.
El sueño del Grand Slam para los de Martin Johnson se mantiene intacto, algo que no lograban desde 2003, año también de su título mundial, aunque en la última jornada deberán ganar a domicilio a Irlanda a la espera de lo que haga Gales ante Francia. Escocia alargó su racha negativa en Twickenham, donde no gana desde 1983, y se jugará la "cuchara de madera" contra la sorprendente Italia.