pamplona. El segundo graderío del frontón Labrit presenció ayer, además del espectáculo deportivo, uno mucho más bochornoso, que acabó con un aficionado agredido por un ayudante de cámara de la productora Bainet, encargada de la retransmisión del programa Frontón. Según testigos presenciales, el triste suceso comenzó cuando algunos espectadores del segundo graderío, mostrando evidentes signos de embriaguez, comenzaron a lanzar el contenido de sus vasos hacia la cancha.
Tanto los jueces de cancha como los aficionados situados en las gradas inferiores se volvieron en repetidas ocasiones hacia la zona de donde procedían los lanzamientos, intentando reprender a los ebrios espectadores. Según declararon los presentes, un joven lanzó bebida sobre la zona de la cámara, situada en la parte trasera del frontón, debajo del segundo graderío. En ese momento, un ayudante de cámara -claramente irritado- recriminó la acción al espectador, levantando el brazo amenazadoramente, a lo que el aficionado respondió con un provocador "sube aquí y chúpamela".
El ayudante de cámara no se hizo esperar: gestualmente le indicó al espectador que aguardara en el sitio. Subió al segundo graderío y -siempre, según testigos presenciales-, sin mediar palabra, agarró por el pelo al alborotador. Uno de los acompañantes del belicoso aficionado se situó entre los dos y empujó al ayudante de cámara. La réplica de éste llegó en forma de puñetazo a la altura de la nariz, lo que le causó una herida que precisó atenció médica y varios puntos de sutura.
Pocos minutos después, cinco efectivos de la Policía Municipal se personaron en el frontón pamplonés para calmar los ánimos y tramitar las diligencias oportunas. En cuartos separados, agresor y agredido narraron lo ocurrido a los agentes, que decidieron dejar a ambos en libertad, aunque fuentes cercanas al espectador herido, terriblemente indignados por el desagradable suceso, aseguraron que iban a tramitar la correspondiente denuncia contra el ayudante de cámara. >dna