Valentino Rossi mantuvo su primacía en los entrenamientos de MotoGP de la temporada 2010 al ser el más rápido en la segunda y última jornada de pruebas en el circuito malayo de Sepang, que estuvo marcada por la inestabilidad meteorológica. Una vez que la pista se secó, la situación regresó al mismo sitio que en la jornada anterior, en la que Rossi había marcado el mejor tiempo. Si en la primera jornada el piloto de Yamaha ya fue el más rápido, en la segunda fue el único que logró romper la barrera de los dos minutos y un segundo (2:00.925).