Mientras las luces del Zinemaldia se van apagando –cita en la que se ha estrenado la versión cinematográfica de la novela Los últimos románticos de la escritora laudioarra Txani Rodríguez, y se ha premiado tanto a la actriz oyonesa Edurne Azkarate como al director gasteiztarra Paul Urkijo por Irati–, el calendario de festivales no para. De hecho, este jueves arranca la gran referencia del cine fantástico y de terror. El Sitges Film Festival llama a la puerta y lo hace con dos estrenos de largometrajes que llevan la marca de Álava, sin perder de vista la selección de un cortometraje también salido del territorio.
En los últimos años, el referencial certamen ha dejado muy buenas noticias para el sector audiovisual alavés. El mencionado Paul Urkijo ha presentado allí sus dos primeras películas de larga duración –Errementari e Irati– consiguiendo un gran respaldo, también en forma de premios. Tampoco hay que olvidar la acogida que tuvo Baby, otro filme que salió del festival con su galardón bajo el brazo. Sin duda, un más que buen recuerdo para el director vitoriano Juanma Bajo Ulloa, que justo ahora está terminando en Álava el rodaje de su próximo filme, El mal.
Pero más allá de distinciones o no, lo cierto es que Sitges proporciona un escaparate más que interesante, una puerta de entrada a público, medios de comunicación y profesionales del sector de primer nivel. “Es un festival referencial y es muy importante estar en él”, apunta la directora, animadora, guionista y productora Sonia Estévez.
Esos placeres tan necesarios
Ella ha sido seleccionada para tomar parte en la sección Sitges Family, dentro de la cual se podrá ver, tanto el día 6 como el 12, su última producción estrenada, el cortometraje de stop motion Plazer bat. Se trata de un trabajo que viene a tomar el relevo de Malkoak y de Txotxongiloa, trabajo por el que Estévez estuvo nominada a los Goya.
Se trata de una creación que “habla sobre los pequeños placeres. Pone en valor los placeres simples de la vida. A veces pasan desapercibidos o los terminamos convirtiendo en hábitos”, explica la autora sobre esta obra producida por Tik Tak Film Studio. La plastilina en blancos cálidos se convierte en un elemento fundamental para llevar a cabo una obra en la que, por cierto, participa un Koldo Uriarte que ya sabe lo que es conseguir premio en Sitges por la mencionada Baby.
Detalles a un lado, lo cierto es que Plazer bat acaba de iniciar su camino ante el público y ya ha sido seleccionado en citas muy importantes, aunque todavía no se pueden anunciar. Mientras tanto, Estévez está preparando un nuevo cortometraje sin perder de vista que, a través de Elkarrekin Sortzen, está empezando a dar los primeros pasos para ver la posibilidad de hacer un largometraje de stop motion.
Lo nuevo de Hernando
En cuanto a los dos estrenos con sello alavés, el primero que se producirá el 10 de octubre, además dentro de la Sección Oficial. El realizador vitoriano Pablo Hernando pondrá de largo ese día su nuevo y ambicioso proyecto, Una ballena, película protagonizada por Ingrid García-Jonsson y Ramón Barea.
Todo parte de la historia de una implacable asesina a sueldo, que tiene una conexión misteriosa con otro mundo, habitado por monstruos. Ello le confiere habilidades especiales, pero al mismo tiempo le arrebata lentamente su humanidad. Es la premisa básica de una creación que se rodó el año pasado, en concreto en primavera de 2023 en diferentes localizaciones de Bizkaia.
Ya entonces, el director y guionista apuntaba que las labores de postproducción iban a ser largas por las propias características del filme. Ahora es el momento de compartir el resultado de toda esta labor. Detrás de la producción se encuentran Señor y Señora (Gipuzkoa), junto a Sayaka Producciones (Bizkaia) y a Orisa Produzioni (Italia), siendo distribuida la creación por Elastica Films.
Hernando, y así lo ha expresado en ocasiones anteriores a DNA, tiene claro que “va a ser una película de género que va a funcionar muy bien como entretenimiento”. De todas formas, “lo que más me importa no es eso, sino que lo que más me apetece es que hipnotice a la gente”. La primera prueba de fuego va a llegar en un marco incomparable y además en su Sección Oficial.
Rodada en Álava
En el caso de Hernando, todavía no se conoce cuándo llegará Una ballena a las salas. No sucede lo mismo con Historias de Halloween, de Kiko Prada. El filme se encontrará con el gran público el 31 de octubre, aunque va a ser en Sitges cuando se presente de manera oficial. Eso ocurrirá los días 11 y 12 dentro de la sección Panorama.
Aunque no estaba previsto que fuera así en un principio, la nueva creación del director y guionista terminó rodándose a finales del pasado invierno en tierras alavesas, sobre todo en Gasteiz pero también en otros puntos del territorio como Gometxa, Mendiola y en un Conjunto Monumental de Quejana.
Atlántika Films, The Other Side Films, Autocinema INK y Carabo Films AIE en colaboración con RC Service están detrás de una obra que centra su mirada en Luis, que vive con sus padres en una urbanización. La tarde del 31 de octubre, su madre le anima a hacer truco o trato cerca de su casa y así dejar de lado por un rato los videojuegos. Tras pasear por distintas calles, llega al centro de Vitoria, donde llama su atención un viejo anticuario. Dicho lugar está regentado por Ander, que le muestra los secretos que oculta el enigmático lugar a través de diversas historias.
Macarena Gómez junto con Christian Thomas y Javier Botet lideran el reparto de un filme que busca que el público “lo pase bien” y, además, “sienta un poco de miedo”. La película está orientada a un público muy amplio, pero quiere, ante todo, ser un punto de atracción para los espectadores jóvenes. De momento, toca poner de largo la propuesta en el festival catalán, un marco en el que el sello audiovisual alavés seguro que vuelve a brillar.
