El grupo de teatro La revoltosa regresa esta semana a los escenarios en Agurain. Lo hace un año después de su último encuentro con el público para poner en escena su nuevo montaje No olvidaré. Lo que retumba en la memoria, de Sonia Aguayo.

Este martes se ponen a la venta las entradas para las tres representaciones de la obra, que se van a producir en la sala Harresi. Los pases tendrán lugar el sábado 11, el domingo 12 y el domingo 19, en todos los casos a las 19.30 horas

Ensayo de ‘No olvidaré’ E.S.P.

El montaje se sitúa en los años 40, momento en el que la desesperanza, el hambre y el dolor eran latentes entre la mayoría de la población española, según explican desde el grupo. En esta obra se refleja la necesidad del ser humano de soñar, la importancia de la amistad y el sentimiento confuso de si merece vivir cuando ya te han quitado todo. “¿Cómo vivir cuando te intentan silenciar constantemente? ¿La muerte está jutificada? ¿Qué pasa con el sufrimiento, el tiempo puede curarlo? ¿Se puede perdonar al culpable de tu dolor?”, se preguntan desde la agrupación de Agurain.

Una propuesta colectiva

Tres jóvenes –Pau, Mateo y Katalina– harán todo lo posible para cambiar su destino y condición de vida. La pieza plantea un acercamiento a la situación de la época, estableciendo relaciones con el presente.

Sobre el escenario estarán Eder Santos, Esti López de Ciordia, Gari Uriarte, Ibai Santos, Imanol Murguialday, Irati Sáez de Urabain, Jon García de Vicuña, Koldo Cienfuegos, Nahiara Gastiain, Alberto Muñoz Aritz Orobengoa, Remedios Pagán, Janire Palacios, Jokin Gil, Jokin Martínez y Leire Alfonso, todos ellos bajo la dirección de la propia autora del texto, Sonia Aguayo. 

La obra tendrá una duración aproximada de hora y cuarto y en ella podrán escucharse canciones en directo. Con esta obra, la compañía cambia de registro por completo. “Venimos de la comedia y esta pieza es un drama”, señalan Aguayo y Alfonso, al tiempo que reconocen sentirse “nerviosas” por la reacción del público. Además apuntan que “para nosotras es un reto hacer este tipo de personajes porque no coinciden ni en el tiempo ni en las ideas”.