La música como principio y fin. Un claro ejemplo está en quienes le están tomando el relevo en su camino cultural como David, Jabolo y Koldo. El apellido Sagastume es cultura. La huella de Manu Sagastume Arregi permanecerá en Álava, más allá de que el músico, director de coros e investigados falleciese este pasado sábado en la capital alavesa.

El funeral se producirá este martes en la parroquia de San Miguel Arcángel. Será otro punto de encuentro para recordar la figura de este incansable agente cultural nacido en Ziordia, aunque su camino se cruzó pronto con el de Gasteiz.

Desde aquí desarrolló una infatigable labor, siendo buenos ejemplos de ello la puesta en marcha del Coro Araba -cuya actividad cesó el año pasado- o el desarrollo del proyecto de la Capilla Peñaflorida.

Quien fuera bibliotecario en el Conservatorio de Música Jesús Guridi deja también no pocos artículos e investigaciones sobre creadores y músicos alaveses. Ahí están, además, publicaciones como Gasteiz eta musika: zortziehun urte adiskidetasunean y Evolución en la música para txistu.