Será el próximo 15 de noviembre cuando el Centro Muxikebarri de Getxo acoja el acto protocolario en el que se entregarán los galardones. Pero habrá pocos nervios en esa cita. Mejor dicho, pocas incertidumbres porque los Premios Euskadi de Literatura ya conocen a los ganadores en todas su categorías. En todo caso, será un encuentro para celebrar la salud de las letras vascas y “poner en valor la cultura”, máxime “en estos tiempos” de incertidumbre, división y conflictos, como apunta el consejero de Cultura y Política Lingüística Bingen Zupiria.

Hace unos días fue Donostia el escenario elegido por el Gobierno Vasco para anunciar el triunfo en la edición correspondiente a 2023 de Arantxa Urretabizkaia (Azken etxea), Patxi Zubizarreta (Zerria) y Joseba Larratxe (Ni ez naiz Mikel Laboa) en las modalidades de Literatura en Euskera, Literatura Infantil y Juvenil en Euskera e Ilustración de Obra Literaria. 

Este lunes, con Artium como contexto, se ha completado la lista de premiados con Alejandro Morellón (El peor escenario posible), Maialen Berasategi y Joxe Mari Berasategi (Paradisua), Miren Billelabeitia (Norbeak maite duena) y Ander Izagirre (Vuelta al país de Elkano) en las categorías de Literatura en Castellano, Traducción Literaria al Euskera, Ensayo en Euskera y Ensayo en Castellano respectivamente.

Humor negro

Más allá del valor económico de los galardones (cada apartado está dotado con 18.000 euros), los Premios Euskadi buscan ser también una invitación a la lectura, no solo de los textos seleccionados. Con todo, es indudable también la promoción que supone para los libros distinguidos, alguno de los cuales ya cuenta con respaldos importantes.

Es el caso de Morellón y El peor escenario posible (Fulgencio Pimentel). El escritor madrileño publicó este libro gracias a ganar el Ignacio Aldecoa de 2022, impulsado por la Diputación Foral de Álava. “Agradezco que se reconozca el humor irreverente” de una obra que lanza una “mirada pop” a la “inminencia de la tragedia”.

De su creación, el jurado dice que es “un libro claro y divertido, una lectura gozosa”. La obra “reflexiona, con gran inteligencia y buenas dosis de humor negro, sobre nuestra relación con lo extraordinario y lo maravilloso, sobre nuestra capacidad de adaptación a las situaciones extrañas o insospechadas, lo cual nos hace supervivientes pero también seres apáticos”. 

Padre e hija

A seis manos se ha escritor Paradisua. Las primeras son las de Abdulrazak Gurnah, Premio Nobel de Literatura. Las otras cuatro son las de Joxe Mari Berasategi (ex jefe del Servicio de Euskera de la Diputación alavesa) y Maialen Berasategi.

Ambos, padre e hija, firman una traducción que se convierte en una “lectura deliciosa”, según el jurado. Aunque más allá del resultado final, la traductora gasteiztarra subraya y valora el trabajo conjunto, esa apuesta por la colaboración, más allá de la relación familiar evidente.

Letras para pensar

En lo que respecta a la categoría de Ensayo, en el caso de la modalidad de euskera, los Premios Euskadi distinguen a Billelabeitia por un trabajo que destaca el “papel y la importancia de la lectura” proponiendo nuevas formas para atraer a los jóvenes. “Con un estilo elegante y una escritura redonda”, el jurado dice que la autora logra un “texto redondo creado con una cuidada y fina prosa”. “Sigo estudiando”, sonríe la autora, al tiempo que agradece a su alumnado la ayuda para hacer esta obra.

Para seguir reflexionando también se distingue a Izagirre. “Las sociedades son fuertes cuando se comunican y se mezclan con otras”, describe el donostiarra. El pueblo vasco “no ha sido un pueblo aislado, sino que ha viajado mucho y se ha mezclado mirando al mar” y desde ahí se construye un libro que, según el jurado, combina “el rigor de la indagación histórica con el lenguaje desenfadado y el sentido del humor”.