Todavía tiene que pasar un verano, pero la nueva edición del Festival Vasco de Cines Africanos ya está ultimando los detalles de su programación. En concreto, del 2 al 7 de octubre, Afrikaldia abrirá una gran ventana a la producción audiovisual del vecino continente con la idea de seguir profundizando en esa labor de conocimiento y difusión de una creación cinematográfica no tan lejana aunque, por desgracia, casi nada presente en los circuitos comerciales más próximos.

A la espera de conocer el programa al detalle, el certamen volvió ayer a las instalaciones de Fotoprix para dar algunos detalles de la configuración de su tercera entrega, una edición que centrará la mirada en el cambio climático, según explicaron las entidades promotoras del evento, Kultura Bendera Elkartea y Asociación Africanista Manuel Iradier.

Con los cines Florida como punto de referencial fundamental para el público, la intención de la cita sigue pasando por ofrecer lo mejor del cine africano, tanto del continente como de su diáspora. En este sentido, está previsto que se proyecten en el arranque de octubre una docena de largometrajes de ficción y documentales en torno a distintas temáticas e intereses.

Eso sí, también se realizarán actividades paralelas, como los encuentros con profesionales del sector audiovisual que se llevarán a cabo en el Campus de Álava. Todo ello en un 2023 en el que el festival contará con la colaboración del Gobierno Vasco, el Ayuntamiento de Vitoria, Fundación Vital y la Agencia Vasca de Cooperación para el Desarrollo.

Una imagen para el certamen

En la presentación de ayer, Afrikaldia aprovechó la ocasión para compartir su nuevo cartel, realizado por la artista de Guinea Ecuatorial Marian Davies Rosario. Este año, como novedad, la obra estará expuesta en los diferentes espacios de los patrocinadores y colaboradores del festival.

En la presentación, Davies explicó que “el cartel parte de una obra pictórica, realizada con acrílicos y con materia de carga para dar volúmenes y crear texturas que sean capaces de transmitir sensaciones”. Asimismo, señaló que se trata de una obra muy simbólica, poniendo al continente africano como la solución a la crisis climática, ya que “en África está el origen y a ella tenemos que recurrir para encontrar soluciones”.

Según el último estudio de la agencia meteorológica de la ONU, África solo emite entre el 2% y el 3% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, pero sufre las consecuencias de una forma exagerada, según explicaron desde el certamen gasteiztarra.

Así se pondrá también de manifiesto en un festival que busca sumar a la programación de la capital alavesa una iniciativa que, como otras, ayude a “tejer puentes y a conectar diferentes culturas”, según apuntó, desde la dirección del evento, Aurelien Christian Manga.