- El mítico Orient Express, el nonagenario tren de lujo europeo conocido por sus viajes a Estambul y por inspirar a la famosa escritora británica Agatha Christie, protagoniza una exposición en Bruselas en la que pueden verse vagones originales, recreaciones de los compartimentos y carteles publicitarios de la época. Acogida en Train World, el museo de la compañía ferroviaria nacional de Bélgica, SNCB, la exhibición ofrece dos coches auténticos del período de entreguerras en los que los visitantes pueden subir hasta el próximo 17 de abril.
El primero de ellos, un vagón bar, recrea en las mesas de su interior las actividades más comunes que tenían lugar hace casi 100 años entre la diversidad de pasajeros del Orient Express: una máquina de escribir, cartas de póker, dibujos infantiles, una revista de belleza, tabaco de pipa o una guía turística sobre la antigua Constantinopla. “En el vagón bar se ve el lujo en los sillones y en las mesitas. La idea era realmente que los pasajeros, como en un bar, pudieran ir a tomar una copa, sentarse y conversar con sus amigos”, explica el responsable de Train World y del patrimonio histórico de la SNCB, Thierry Denuit.
El segundo de los coches es un vagón restaurante que, como particularidad, dispone las mesas muy cerca las unas de las otras, lo suficiente como para suscitar una charla espontánea entre dos completos desconocidos. “Empezaban las conversaciones. Y tantas veces éramos testigos de personas que se reunían en el Orient Express sin conocerse antes y que, al tener que estar juntos durante días y días, acababan por conocerse muy bien al final del viaje”, agrega Denuit.