La trigésimo séptima edición de la Semana de Cine Vasco llega este sábado a su final, una despedida en la que el certamen organizado por la Fundación Vital va a hacer entrega del premio Uno de los Nuestros, un reconocimiento con el que se quiere poner en valor a los profesionales del sector audiovisual alavés y que este año, cómo no, va a ir a parar a la actriz vitoriana Patricia López Arnaiz, que el próximo sábado 6 de marzo puede ser la primera alavesa en ganar un Goya como mejor intérprete principal y la primera actriz vasca en hacerlo por un papel en euskera gracias a su trabajo en Ane, la primera película de David Pérez Sañudo.
Como recuerdan desde la Fundación Vital, López Arnaiz interpreta el papel de Lide, una madre separada que intenta abrirse paso en la vida como vigilante de seguridad en las obras del tren de alta velocidad, y al mismo tiempo hacerse cargo de una hija adolescente de la que sabe menos de lo que cree. La actriz alavesa ha trabajado en esta ocasión a las órdenes de Sañudo, junto a Mikel Losada, Jone Laspiur, Aia Kruse, Nagore Aranburu, Gorka Aguinagalde y Fernando Albizu. Este papel le ha valido también el Premio Forqué, entre otras distinciones, a lo que la próxima semana se pueden sumar los Goya y los Feroz.
Después de licenciarse en Publicidad y Relaciones Públicas, Patricia López Arnaiz estudió interpretación en la escuela de teatro Ortzai. Completó su formación con talleres y clases de interpretación, danza y creación escénica. Sus inicios profesionales fueron en el teatro, también en su propia ciudad natal, hasta que en 2009 descubrió el audiovisual, con un personaje secundario en 80 egunean, primer largometraje de ficción de Jon Garaño y Jose Mari Goenaga. Desde entonces, y sin dejar la formación de lado, alternó el teatro con pequeños papeles en series y películas como Qué vida más triste, La herida, Lasa eta Zabala o Un otoño sin Berlín.
En 2017, destacó con un papel secundario en El guardián invisible, de Fernando González Molina. Ese mismo año tuvo un gran espaldarazo en su carrera con su primer protagonista en la serie La Peste, de Alberto Rodríguez y el largometraje El árbol de la sangre, de Julio Medem.
Su papel protagonista en la serie La otra mirada en TVE, estrenada en 2018, le dio una gran visibilidad para el gran público, una nominación como mejor intérprete femenina en los Premios Iris y el premio Ondas en la misma categoría. Ese mismo año, participó en Mientras dure la guerra, de Alejandro Amenábar y rodó la segunda temporada de La Peste.
En 2020, pese a la pandemia, además de Ane, trabajó también en Ofrenda a la tormenta, de Fernando González Molina, Uno para todos, de David Ilundain, y Campanadas a muerto, de Imanol Rayo. Ahora se encuentra rodando, junto a Javier Rey, La cima, de Ibón Cormenzana.