Hace justo un mes, la decimoquinta edición de Ondas de Jazz se puso en marcha con un objetivo básico para este curso que pasa por devolver a casa a músicos jóvenes que han dejado Gasteiz para desarrollar su trayectoria lejos de tierras alavesas. Creadores que, en algún momento de su estancia aquí, tuvieron relación con la propuesta de la asociación Jazzargia y que ahora vuelven de su mano para compartir tanto su momento actual como su proyección hacia el futuro. Esta vez, el turno va a ser para los hermanos Nico y Eolo Andino, que van a liderar un grupo con intérpretes tanto del País Vasco como de Francia -o residentes en el país vecino- en una audición para la que eso sí, no queda ni una sola invitación disponible, como pasó con la apertura de esta temporada y tiene pinta que vaya a suceder en el futuro, sobre todo si no se puede ampliar el aforo del Conservatorio Jesús Guridi.

Que la situación cambie será un indicativo más que interesante para la sociedad en su conjunto porque querrá decir que el covid-19 va perdiendo espacio. De momento, lo que no va a poder impedir es que a partir de las siete de esta tarde, Andino Brother’s Mess cope el protagonismo. Junto a la trompeta de Nico Andino y el saxo de Eolo Andino, los espectadores se acercarán al piano de Thierry Wendling, la guitarra de Nicolás Martín Alfaro, el contrabajo de Aritz Luzuriaga y la batería de Pier Stefano Bruera.

Entre Vitoria y París está transcurriendo el camino de los dos hermanos, que ya han actuado juntos en su ciudad en ocasiones anteriores, como pasó en el Jardín de Falerina en 2019, en el marco del Festival de Jazz de Gasteiz, que este año no se ha podido llevar a cabo a causa de la pandemia. En esta ocasión, la agrupación conformada por los dos intérpretes propondrá a los presentes en el Jesús Guridi un viaje por diferentes composiciones propias, buenos ejemplos del sello propio que cada uno está estableciendo.