- El dibujante argentino Joaquín Salvador Lavado, Quino, popular por ser el creador de la genial Mafalda, cuyas aventuras han sido traducidas a 30 idiomas y llevadas al cine y la televisión, falleció ayer en Mendoza a los 88 años.

Hijo de españoles y poseedor de galardones como el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades y la Medalla de la Orden y las Letras de Francia, Quino desarrolló las aventuras su personaje más popular entre 1964 a 1973, aunque las historias de la icónica niña se han replicado en todo el mundo hasta la actualidad. Desde hace unos años, el autor, que se había mudado a Mendoza a finales de 2017, tras quedarse viudo, sufría problemas de salud y se trasladaba en silla de ruedas, aunque siguió asistiendo a diversos homenajes a su obra. La familia explicó ayer que el fallecimiento se produce por “razones propias de la edad y derivaciones de su salud de este último tiempo”, y destacó que Quino había vivido su vida “íntegramente”.

Heredero -según él mismo decía-, del carácter trágico y el humor negro de los andaluces, de donde procedían sus padres, adquirió notoriedad gracias al personaje de Mafalda que creó poco después de que una compañía de electrodomésticos le encargara una publicidad con un personaje que comenzara con M, la inicial de Mansfield, que no llegó nunca a publicarse por el fracaso de la firma.

Nació en Mendoza el 17 de julio de 1932, año en el que sus padres españoles llegaron a Argentina. En 1945 comenzó a estudiar dibujo en la Escuela de Bellas Artes de aquella ciudad, pero cuatro años después los abandonó al decantarse por el mundo gráfico y la historieta. “No solo me legó la vocación, sino una filosofía de la vida que a partir de mi abuela me ha marcado mucho. La politización de mi familia me marcó muchísimo”, evocaba. En 1954 se trasladó a Buenos Aires, donde consiguió publicar su primera página de humor gráfico en el semanario Esto es. A partir de 1957 publicó regularmente en medios como Rico Tipo, Dr. Merengue o Tía Vicenta y también en ilustraciones de campañas publicitarias. Expuso por primera vez en Buenos Aires en 1962 y un año después publicó su primer libro de humor, Mundo Quino, una recopilación de sus dibujos. Mafalda apareció por primera vez en Gregorio, el suplemento de humor de la revista Leoplán el 29 de septiembre de 1964, para pasar a publicarse regularmente en el semanal Primera Plana de Buenos Aires. Aquella tira con las aventuras de Mafalda y sus amigos, Manolito, Susanita y Felipe, pronto alcanzó el éxito y en marzo de 1965 comenzó a publicarse en el diario argentino El Mundo, en el que siguió apareciendo hasta el cierre de esta publicación, en diciembre de 1967. Al año siguiente, Mafalda y sus aventuras continuaron en Siete días.

Al mismo tiempo fueron apareciendo los libros de Mafalda, en los que se reunían las tiras según su orden de publicación. El primero de ellos salió a la venta en diciembre de 1966 y posteriormente vieron la luz: Así es la cosa, Mafalda (1967), Mafalda 3 y Mafalda 4 (1968), Mafalda 5 (1969), Mafalda 6 (1970), Mafalda 7 (1971), Mafalda 8 (1972), Mafalda 9 (1973) y Mafalda 10 (1974). Pero no fue hasta 1969 cuando Mafalda se publica por primera vez fuera de Argentina, primero en Italia Mafalda la contestataria; y en 1970 en España, donde la censura franquista obligó a los editores a ponerle una franja en la tapa con la leyenda “para adultos”.

Quino publicó su segundo libro de humor gráfico titulado A mí no me grite (1972) y el tercero, Yo que usted (1973). Ese mismo año, Quino decidió dejar de dibujar Mafalda, si bien luego recuperó el personaje en varias ocasiones. Así, ilustró campañas publicitarias de Unicef en 1978, de la Declaración de los Derechos del Niño, de la higiene bucal en Argentina en 1983 o para promover las primeras elecciones de los Consejos Escolares en España, en 1986. En 1976, Quino se trasladó a Milán y tres años más tarde dejó Siete días para publicar en el diario Clarín.

Dibujante del Año 1983 en Argentina, en esas fechas vio la luz su compendio Ni arte ni parte y en 1987 Sí, cariño... En 1989, para celebrar los 25 años de la primera tira de Mafalda, se organizó la exposición Mafalda Inédita y tres años después, Madrid acogió la gran muestra El Mundo de Mafalda. En 1999 vio la luz ¡Qué mala es la gente!, y al año siguiente ganó el Premio Iberoamericano de Humor Gráfico Quevedos, concedido por la Universidad de Alcalá de Henares. En 2014 recibió el Premio Príncipe de Asturias de la Comunicación y Humanidades junto con los también dibujantes Francisco Ibáñez, creador de Mortadelo y Filemón, y Albert Uderzo, coautor de Astérix y Obélix.

Simplemente Quino, que llegó a firmar rodeado de multitudes, se publicó en 2016, y en él se recopilan antiguas tiras publicadas en prensa. Aunque nunca le gustó hacer balances, “de vez en cuando” no le quedaba otra que hacerlos. “Sé que he puesto el dedito en una tecla que mueve muchas cosas”, confesaba el mendocino, quien tenía claro que, del mundo de ahora, alejado en tiempo y circunstancias de 1973, su eterna hija opinaría que es “un desastre” y “una vergüenza”.

Desde la cultura. Diversos representantes del mundo de la cultura se despidieron de Quino compartiendo en redes sociales muchas de sus viñetas. “Nos ha dejado Quino, creador de la inolvidable Mafalda. Sus certeras palabras viajaron a ambos lados del Atlántico gracias a sus viñetas y su peculiar sentido del humor”, lamentaron desde la RAE. El actor Santiago Segura recordó que nos deja “un genio del humor. Un titán del cómic argentino. Maestro del humor gráfico y creador de Mafalda”, añadió. La banda madrileña Vetusta Morlale agradeció su “ingenio y manera de mostrar el mundo”. Y le brindó “un pequeño homenaje” al dibujante en forma de vídeo, cantando Profetas de la Mañana junto a la Mafalda de San Telmo. Mientras, Ismael Serrano reconoció que aprendió a leer con Mafalda. El músico Pancho Varonaafirmó que Quino le hizo “feliz”. “Me sé de memoria cada viñeta de Mafalda. Gracias, Quino”, escribió. Y Random House se despidió del “genio del humor que enseñó a reivindicar el sentido crítico, la ternura y a amarse ‘los otros a los unos”.