Vitoria - Llega la época estival y la Catedral Nueva va a iniciar una nueva edición de su programa de visitas guiadas, que en esta ocasión se va a completar con unos recorridos específicos que se van a llevar a cabo por las noches con las vidrieras como protagonistas. Será un aliciente más para adentrarse en el templo, que es también sede desde hace casi 20 años del Museo Diocesano de Arte Sacro. De hecho, en su intención de seguir ofreciendo reclamos tanto para los cercanos como para aquellos que visitan la capital alavesa, el proyecto cultural ha aprovechado la cesión de algunas de sus obras más destacadas para llevar a cabo un proceso de renovación de dos de sus salas, las dedicadas al barroco, una apuesta que se traduce, entre otras cuestiones, en la recuperación de piezas que hasta ahora no se habían mostrado y permanecían en los almacenes.
Es el caso de un talla policromada atribuida a la escuela de Juan Martínez Montañés perteneciente al primer tercio del siglo XVII. Se trata de un Niño Jesús adquirido por la Diputación, una pieza vinculada al linaje de los Gámiz y a la capilla del Dulce Nombre de la Catedral Santa María, según explicó ayer Susana Aréchaga, delegada de patrimonio histórico artístico y documental de la Diócesis de Vitoria.
El museo también ha recuperado seis lienzos entre las que se encuentran dos creaciones del vizcaíno Nicolás de la Cuadra, sin olvidar que, después de la perceptiva restauración, también se va a poder ver de nuevo Lamentación sobre Cristo muerto, de Gaspar de Crayer, que comparte sala con el San Francisco de Asís meditando de rodillas de El Greco y una Inmaculada de Cornelis Schut.
Esta reordenación realizada en estas dos salas, incluyendo la llegada de nuevas obras a la exposición permanente del museo, se ha completado con la renovación del sistema de iluminación, que va a permitir tanto un uso más racional de los recursos energéticos como un mejor visionado de las cinco esculturas y 19 pinturas presentes en ambos espacios. Estos cambios, según Aréchaga, han sido posibles gracias a los “pocos” pero maximizados “recursos con los que contamos” y se ha aprovechado ahora a acometerlos puesto que en estos momentos hay tres importantes creaciones que se encontraban aquí pero que ahora mismo están cedidas tanto en el Museo de Bellas Artes de Álava como en la muestra Las Edades del Hombre.
Para dar a conocer estos cambios, además, la Catedral Nueva va a acoger hoy a las 17.00 horas la charla La Lamentación de Crayer, historia de un cuadro a cargo del profesor Fernando Bartolomé.