Vitoria - Son la Red de Teatros, el público de Gasteiz y Vaivén Producciones tres viejos conocidos que hoy vuelven a reunirse. Lo hacen con el Principal como escenario, donde a partir de las 20.30 horas se podrá ver la última producción de la compañía, un Sherezade eta tipularen azalak cuya realización ha compartido con el grupo portugués Chapitó. La condición femenina, la sociedad patriarcal, las relaciones de pareja, el peso de las tradiciones y la situación del mundo laboral son cuestiones que se funden en una propuesta escénica que se relata en tono de comedia aunque con la puerta abierta a la tragedia. “Es una función que impacta en muchos sentidos”, apunta Ana Pimenta, directora de la agrupación con sede en Donostia.

“Es un montaje que está teniendo un recorrido interesante”, apunta Pimenta, que no esconde que, dentro de la política de Vaivén de recurrir a la colaboración con externos para afrontar cada nueva producción, la elección de Chapitó ha sido todo un reto. “Nosotros siempre le hemos dado mucha importancia a lo textual, al peso del texto, mientras que ellos trabajan en el otro extremo, en lo gestual, en lo físico...”. De la mezcla, dirigida por José Carlos García, nace una versión “libérrima” de Sherezade: “aquí, el sultán que tiene atrapado a nuestros personajes es la propia vida”, ante la que todos quienes toman la palabra “tienen que inventar sus cuentos para intentar sobrevivir”.

De dar vida a los personajes reales y los no tanto se encargan Miren Tirapu, Xabi Donosti e Iraia Elías, que se han convertido, por mor de Chapitó, en unos “atletas del escenario”. En la cocina, “en el sitio de la mujer”, es donde se va sucediendo esta historia protagonizada por un matrimonio en el que, también a través de lo absurdo e irreal, se mira a una sociedad actual en la que la mujer sigue siendo percibida como inferior en todos los aspectos de su vida. Eso sí, “no sólo es importante lo que se cuenta, sino cómo”, aspecto en el que el sello de la compañía portuguesa se nota de manera más que significativa.

Así lo podrán comprobar quienes acudan hoy a un Principal que con esta representación cerrará el abono de euskera de la programación invierno-primavera. Por su parte, Vaivén seguirá el camino de este montaje mientras espera a que llegue el 18 de junio, a una gala de entrega de los Max donde tiene sus opciones de triunfar a lo grande gracias a otro de sus últimos montajes, Último tren a Treblinka.