Donostia - “Te lo replanteas todo. El hecho de enfrentarte ahora a 50 años de trabajo hace que ahora veas que hay un proceso. Cuando estás en ello no te das cuenta, es inconsciente, van saliendo las formas abstractas, las figuras, los paisajes... El libro me va a ayudar a replantearme todo lo que he hecho”. Una publicación que verá la luz en octubre repasará el trabajo y la trayectoria del pintor donostiarra Juan Luis Goenaga, uno de los máximos exponentes del expresionismo vasco.
La publicación, que será un libro de gran formato, la realizará la editorial Nerea, especialista en libros de arte y arquitectura y responsable de publicaciones dedicadas a la obra de autores como Chillida u Oteiza. La financiación correrá a cargo de Petronor, que ya colaboró con Nerea recientemente en un libro dedicado a Jesús Mari Lazkano. La obra contará con entre 250 y 300 páginas e incluirá alrededor de 180 ilustraciones que repasarán, de forma cronológica, las series de Goenaga. El texto (en euskera, castellano e inglés) lo llevará a cabo el historiador de arte y conocedor de la obra del donostiarra Mikel Lertxundi y habrá un prólogo a cargo de Miguel Zugaza, director del Bellas Artes de Bilbao.
Aunque reconoció que no le gusta demasiado hablar, ayer durante la presentación del proyecto Goenaga se mostró agradecido por poder contar con un libro así que repase toda su trayectoria, desde sus primeros cuadros en el año 1971. “Aunque en realidad mi primer óleo lo pinté con seis años”, recordó. A pesar de que ha trabajado en otros ámbitos como la fotografía o la escultura, Goenaga incidió ayer en que para él lo importante es la pintura: “La pintura es sagrada, desde los pintores de las cuevas de Ekain hasta El Greco, todo es lo mismo, y cada uno aporta algo más”.
abstracción y figuración “Goenaga juega con la abstracción y la figuración, aborda los dos con naturalidad, sin renunciar a ningún lenguaje”, apuntó Lertxundi, que añadió que aunque el libro tendrá un texto riguroso, el objetivo es que sea “asequible” para un público amplio. El historiador reconoció que es “un placer y un reto” abordar este trabajo, aunque reconoció que todavía “es un libro difuso”. La consejera delegada de la editorial Nerea Marta Casares explicó ayer que fueron los hijos de Goenaga, Telmo y la actriz Bárbara, los que le propusieron la idea del libro, que le “atrajo” desde el primer momento por “la calidad” del trabajo del pintor. “Es un autor importante y no había ningún libro similar sobre su obra”, explicó, al tiempo que recordó que era amiga de la infancia de la mujer de Goenaga, que falleció hace varios años: “Sirva este libro también como homenaje a ella”.
Goenaga se ha consolidado como uno de los grandes nombres de la pintura vasca. Emergió a principios de los años 70 y desde entonces ha desarrollado un estilo expresionista y matérico que muestra también su arraigo por la tierra, así como por temas etnográficos y mitológicos vascos. Desde el baserri de Alkiza en el que trabaja, representa la naturaleza y el mundo rural vasco, “en sus aspectos más abstractos y primigenios: aire, fuego, gotas, hierba, tierra, ramas, raíces”. Sus primeras series fueron bautizadas como Itzalak, Belarrak, Hari Matazak, Sustraiak o Sorgin Kontuak.
Él mismo clasifica sus obras entre las relacionadas con la arqueología y la pintura rupestre, los paisajes, las pinturas figurativas y las abstractas. También se ha interesado por el mundo de la pareja y el desnudo, con algunas series sobre este tema.