Vitoria - Desde ayer se lleva a cabo en la localidad navarra de Lakuntza la vigésima edición del Hatortxu, escenario elegido para la despedida definitiva de una banda referencial para la escena de Euskal Herria. Betagarri cierra su camino.

Muchos se sorprendieron por esta despedida que anunció Betagarri, pero la banda llevaba casi dos años sin tocar... ¿Cómo han sido estos meses definidos como “periodo de reflexión”?

-Hace dos años vimos la posibilidad de parar un poco el proyecto de Betagarri en todos los sentidos, a nivel de directos, de composición... No vernos en una temporada para ver si nos echábamos en falta. Como darse un tiempo, que pasa también en las parejas. Veíamos que habíamos perdido un poco de ilusión, de ganas y de feeling entre nosotros. Nos dimos dos años y a la vuelta de ese periodo empezamos a componer temas nuevos. Prácticamente tenemos el disco nuevo hecho, pero algunos plantearon esta despedida en el grupo y, al final, entre todos vimos la necesidad de decir: en el Hatortxu Rock se acaba esto. Cada uno tendrá sus ideas y su forma de pensar, pero han sido diferentes circunstancias las que han dado el carpetazo final al proyecto. No ha sido una razón en especial. Han sido todas y ninguna, no sé cómo explicarlo. Al final ves que se ha muerto el proyecto o que en este momento de nuestras vidas no somos capaces de llevarlo adelante.

Tras haberse tomado el tiempo y la distancia para valorarlo, ¿es una decisión firme o se trata quizá de un hasta pronto?

-Yo creo que es firme. Nunca digas de este agua no beberé, ni este cura no es mi padre, pero los grupos son como las parejas, una vez que el proyecto de vida ya no es el que tú quieres, te separas y vas por diferentes caminos. Esto es lo que ha pasado aquí, vamos por vías distintas y de este proyecto saldrán otros, creo. Se contempló también la posibilidad de hacer una gira de despedida. Se votó y la decisión fue que todo se acababa en el Hatortxu Rock.

Han sido veinticuatro años como grupo, con todo lo que ello conlleva, ¿qué supone el echar la vista atrás a todo este viaje que ha sido Betagarri?

-Betagarri ha sido mi vida. La mitad la he dedicado a ello y ha sido muy grato. No lo cambiaría por nada. Ha sido una experiencia brutal. A todos los niveles. Hemos currado muchísimo, porque la gente solo ve cuando te subes al escenario y algunos te aplauden, pero no lo que hay detrás y todo lo que trabajas. Hemos influido en bandas que están tocando ahora y hacen algo parecido a lo que hacemos nosotros. Hemos marcado a gente, hay seguidores que se han enamorado con nuestras canciones, otros que han llorado con ellas. Y eso a nivel emocional es muy bonito. Me quedo con toda la gente que hemos conocido y con haber hecho feliz a muchas personas.

Se anunció hace unos días el adiós, pero queda el concierto de hoy. ¿Cómo afrontan esta cita, que será su vuelta a los escenarios, pero también la despedida?

-El otro día un chavalito joven me dijo que iba al Hatortxu y que tenía muchas ganas de vernos, que será su primer concierto... y el último. Al final con estos dos años de parón ha habido mucha gente joven que no nos ha visto. Sé que hay muchas personas que se han animado a ir al Hatortxu Rock por esta despedida de Betagarri también. Y vamos, que va a estar lo mejor del rock vasco y estatal.

En el escenario les acompañarán Xavi Sarrià y Miquel Gironès, de Obrint Pas, ¿cómo surgió esta colaboración?

-Fue una propuesta que vino lanzada desde el Hatortxu Rock. Sabiendo que Obrint Pas ha sido un poco como Betagarri aquí, pero con mayor repercusión internacional y referentes en Cataluña, vieron la posibilidad de lanzarles un órdago a los dos alma mater del grupo para ver si se animaban a venir a tocar unas canciones con nosotros. Convencer a Obrint Pas en Cataluña para volverlos a juntar ha sido imposible, y al Hatortxu les han dicho que sí. Es algo que nadie había conseguido en los últimos años. El viernes -por hoy- tenemos ensayos por la mañana con ellos y luego iremos para Lakuntza.

En ese sentido, en vistas de que será su último directo, ¿cómo han configurado el repertorio y puesta en escena, será una velada especial?

-Anunciamos la despedida tras confirmar el concierto en el festival. De hecho, en el Hatorxu no lo sabían. Así que no vamos a tocar el repertorio completo, tocaremos canciones conocidas y punto. Es nuestra despedida, pero no estamos solos en el festival, no es un concierto único. Va a haber un montón de bandas y aprovechamos ese marco para despedirnos, nada más. Habrá canciones de Betagarri y canciones de Obrint Pas, no sé si haremos algo conjunto...

Mencionaba que Betagarri ha sido su vida, pero hoy se despedirán como grupo, ¿tiene algún proyecto nuevo entre manos?

-La verdad es que más o menos tenemos algo en mente, pero ahora hace falta darle forma. Esto es tan efímero, la música misma... Porque la música no es materia, no se pueden hacer las canciones como rosquillas (risas). Los temas pueden ir por muchos derroteros y un proyecto también, con lo cual no me atrevo a decir absolutamente nada. Me gustaría, claro que sí, porque todavía me encuentro con fuerzas. Ahora, si seré capaz de darle forma a un proyecto, en esta onda probablemente, pues eso el futuro ya dirá.