La cuenta atrás cada vez se acerca más al cero. Faltan pocos días para el Azkena Rock Festival, que llenará las calles de Gasteiz hasta el punto de que no quepa ni un alma, literalmente. O eso dicen los hoteles, albergues y campings de la ciudad, que cuelgan el cartel de completo los días 23 y 24 gracias a este certamen. El año pasado fueron 30.306 los que se desplazaron hasta Mendizabala para disfrutar de dos sesiones de conciertos, diversión y rock. Y es que los habituales de esta cita no se la han perdido ni durante los peores tiempos de la crisis, en los que año tras año, los alojamientos de la capital han seguido registrando porcentajes muy altos en su ocupación. Por lo tanto, este festival no solo pone a la ciudad al servicio de la música, sino que supone un gran impulso para su turismo.

En el caso de los hoteles, el ARF es una garantía para ocupar entre el 90% y el 100% de sus habitaciones cada edición. En concreto, el hotel Silken Ciudad de Vitoria habla de un “lleno absoluto” de sus 149 habitaciones. Así mismo, su jefa de ventas apunta que se tratan de “clientes fieles” que tienen su reserva hecha desde el año pasado y son mayoritariamente españoles, aunque algún inglés y francés también se cuela en sus estancias.

El NH Canciller Ayala, por su parte, prevé alcanzar un 90% de su ocupación para esos días. Sus clientes repiten cada edición ocupando casi la totalidad de sus 173 habitaciones. La directora del hotel, Gema Guillerna, asegura que la mayoría de los huéspedes durante esas fechas son nacionales, aunque también darán cobijo a los grupos musicales protagonistas del festival.

Otra alternativa para los aficionados del rock que asistan a la cita, es alojarse en un albergue. Por ejemplo, una buena opción es el de la Catedral Santa María, o así lo consideran los turistas que lo han elegido, porque también llegará al sold out de sus 90 plazas durante los conciertos.

Además, desde la Fundación Catedral Santa María afirman que la mayoría de los que allí se hospedan repiten y reservan estas fechas con gran antelación. A lo que añaden: “Cuando una persona cancela su reserva para los días del festival, normalmente es ella misma la que trae un conocido para ocuparla”. Esta forma de alojamiento acoge sobre todo a turistas de Madrid y Barcelona, que cómo explican fuentes de la Fundación, llegan a formar “cuadrillas” con personas que han conocido en otras ediciones y deciden venir juntos.

Para los que no les importa pernoctar un poco más alejados de la ciudad, otra opción muy demandada son los campings. En particular, el de Ibaia también se encuentra lleno durante el evento más rockero de Euskadi. En este lugar se pueden encontrar huéspedes tanto extranjeros como nacionales, siendo los franceses los que más se decantan por las caravanas y autocaravanas y los españoles los más dados a elegir los bungalós. Desde el camping Ibaia reconocen que al encontrarse más alejados de Vitoria, se convierte en un lugar más de paso, en el que no se crea tanto ambiente como en las otras opciones de hospedaje.

Así que quienes todavía no tengan donde pasar la noche, ya pueden darse prisa porque en Gasteiz, no va a caber ni un alfiler.