Vitoria - Formarse, compartir y disfrutar en un ambiente distinto al del curso académico, con otras dinámicas, compañeros y profesores entre el 3 y el 8 de julio. Para ello se buscan, como mínimo, 50 instrumentistas de entre 11 y 20 años, jóvenes que serán protagonistas del nacimiento de Udaband, un nuevo campus musical de verano organizado por la Escuela Municipal de Música Luis Aramburu a partir de la iniciativa de Ana Isabel Bravo, quien, de esta forma, retoma en cierta medida la senda de la conocida Txiki Txiki Big Band.
“Colaborábamos con la Txiki y lo hacíamos teniendo envidia de que este proyecto estuviera fuera de Vitoria porque era una idea muy interesante para los alumnos, abarcando a un sector de gente en vías de formación que no tiene otra propuesta parecida a la que acudir”, describe Paco Galve, director de Luis Aramburu. Sin embargo, el año pasado no se pudo llevar a cabo la concentración anual en Rioja Alavesa, una decisión tomada, “sin que se nos diera ninguna explicación”, tras el cambio de nombres en la Cuadrilla, como recuerda Bravo. “Cuando apareció la posibilidad de poder hacer algo parecido aquí vimos claro que Gasteiz no podía desaprovechar esta oportunidad”, lo que se va a traducir en julio en este primer paso.
A futuro, y siguiendo el mencionado modelo, se apostará por recuperar la convivencia de 24 horas y por crecer en lo que se refiere a las actividades complementarias. Pero ahora toca echar los cimientos de ese mañana y hacerlo junto a quienes antes del próximo día 21 completen su matriculación. “En verano estamos todos de otra manera. Aquí vamos a poder seguir aprendiendo pero, sobre todo, los jóvenes van a poder encontrarse con otros profesores y compañeros distintos a los habituales y eso siempre te aporta, te hace ver las cosas de otra manera”, relata Bravo, quien contará para desarrollar el trabajo de ensayos y clases con instrumentistas y cantantes como Iosu Izagirre, Virginia de la Casa y Xabier Inunciaga, sin olvidar la presencia de monitores que ayudarán con aquello que no tiene que ver con los sonidos. Además, “queremos que los componentes de Udaband escuchen también a músicos profesionales de aquí, que puedan charlar con ellos y ellas”, comenta el alma de la propuesta.
“Creo mucho en la música que hemos hecho con la Txiki y esa es una línea de trabajo que debemos mantener. En esa aventura sucedieron muchas cosas mágicas que esperemos repetir y para eso es necesario que seamos capaces de sentir cada día la frescura de esta aventura”, según Bravo, quien añade que no sólo se quiere ayudar a formar intérpretes sino también espectadores: “estamos cansados de escuchar que nos falta público joven en los conciertos de bandas de música y orquestas; vivencias como la de Udaband también son una oportunidad para generar nuevos públicos”.
Tanto ella como Galve recuerdan que aunque en la capital alavesa, a través de Musiketxea, ya se realizan unas colonias musicales, éstas están enfocadas a ofrecer a los asistentes formación para iniciarse en la música. “Aquí estamos buscando gente que ya lleva tocando unos años, que tiene conocimiento”, señala el director de Luis Aramburu, quien añade que Udaband “es un campus práctico más que teórico”. En principio, cada jornada entre el 3 y el 8 de julio arrancará a las diez de la mañana y está previsto que acabe a las seis de la tarde (en el precio de 250 euros se incluyen almuerzos, comidas y meriendas), aunque Bravo sabe que la propia inercia de cada día y los invitados y actividades especiales irán alterando los planes de los asistentes (hay puestos para voz, flauta, saxo, clarinete, oboe, fagot, trompeta, trombón, piano, bajo, guitarra y batería).
El broche a esta primera edición se pondrá el 8 de julio en el Jardín de Falerina de Montehermoso, donde se llevará a cabo un concierto para el público en general. “Llegar a ese momento será interesante, pero lo importante será hacer el camino”, señala Bravo.