eeuu - “El Oscar es el referente en la industria, pero para mí no supone una diferencia importante”, manifestó el cineasta Juanjo Giménez, nominado al Oscar al Mejor cortometraje por la cinta Time code, galardonada con la Palma de Oro en la pasada edición del Festival de Cannes y recientemente en los Premios Goya.
Según indicó Giménez en una reciente entrevista, en conversación telefónica desde Los Ángeles, con motivo de la entrega de los Oscar, “el punto clave” fue haber sido nominados, porque supuso la “diferencia” entre “vivir toda la experiencia o quedarse fuera”, por lo que cree que no es tan relevante ganar o no el Oscar.
Antes de conocerse las nominaciones, su nombre ya aparecía como uno de los favoritos en la prensa especializada, algo que él no tiene “tan claro” porque, según destaca, “cualquiera de los nominados es un merecido ganador”. En este sentido, aseguró que huye de cualquier apuesta o predicción, algo que ve como una “espiral” de la que prefiere mantenerse alejado, motivo por el que no siente demasiado “nerviosismo”, a lo que se une el hecho de estar casi todo el tiempo “ocupado” en la promoción del filme.
Giménez, que llegó hace dos semanas a Estados Unidos y desde entonces ha presentado su cortometraje en ciudades como Washington, Austin y Houston, además de Los Ángeles, señaló que haber ganado la Palma de Oro al Mejor cortometraje “no afecta demasiado” porque la Academia de Hollywood tiene “sus propias reglas de juego” y “una filosofía especial”.
Además, el director, veterano en el cine, explicó que en Estados Unidos, la vida del cortometraje es también “diferente” a Europa, porque se considera “la puerta de entrada a la industria”, mientras que en el viejo continente el concepto es “más difuminado” y cada vez se ve como un “formato único” que va más allá de la “tarjeta de visita”.
De hecho, entre los cortometrajes seleccionados, ha visto que la mayoría tienen una “estructura de largometraje” y que se alejan de las cintas que se encuentran en los festivales europeos, en los que son habituales apuestas “más autorales, artísticas o arriesgadas”. Giménez, quien asume que sus siguientes proyectos se verán afectados por todo lo que está pasando en el contexto de los Oscar, ya está preparando un largometraje y espera escribir en el futuro otro cortometraje.
Preguntado por el coste, señaló que Time code es “un corto austero de bajo presupuesto” y admitió que no le gusta hablar de “cifras” porque está convencido de que no refleja lo que se ha aportado. “En general los cortometrajes se hacen gracias a que la gente trabaja voluntariamente y no cobra su caché”, apostilló. - E.P.