Vitoria - “La música es solo un hobby; el fútbol es mi pasión”, ríe Denis Matsuev. El hecho de ser uno de los pianistas estrella de la escena internacional actual no le impide recordar alguna que otra anécdota con un avión y un derbi de la liga rusa de por medio. Así que entiende que tocar mañana en la capital alavesa tiene una dura competencia con la semifinal de la Copa entre el Alavés y el Celta. Eso sí, cuando se le pregunta qué elegiría él, vuelve a sonreír.
Anécdotas a un lado, el intérprete de Irkutsk despliega ante los medios esa fama de tipo normal que le acompaña siempre a pesar del currículum que atesora a pesar de que hace nada cumplió los 40. Lo hace acompañado por el director de orquesta Alexander Sladkovsky, con quien mantiene una complicidad evidente. Junto a él, están llevando a la Orquesta Nacional Sinfónica de Tatarstán por su primera gira por el Estado, un tour selecto que pasa por la capital alavesa este miércoles a las 20.30 horas para inaugurar el ciclo Grandes Conciertos. La cita será en un Principal que todavía tiene entradas disponibles por 48, 32 y 25 euros.
Aunque tanto Sladkovsky como Matsuev vuelven a sonreír cuando se les cuestiona sobre el programa porque saben que habrá, por lo menos, una sorpresa, la actuación contará con dos propuestas esenciales. Por un lado, la Sinfonía Nº 4 de Tchaikovsky, que servirá para cerrar, en teoría, la noche. Por otro, el Concierto para piano Nº 3 en re menor, opus 30 de Rachmaninov. “Hay quien se ha dedicado a contar las notas y dicen que salen algo así como 55.000”, apunta el pianista, “pero la dificultad no está ahí, ni en la técnica necesaria, ni... La cuestión está en transmitir el alma del compositor y de la obra. Es como el Everest para un pianista”.
Él, de hecho, lo tocó por primera vez con 13 años y cree que a lo largo del tiempo lo ha vuelto a interpretar unas 200 veces. “Es como mi tarjeta de visita”, aunque avisa que para que el resultado sea el idóneo la orquesta es un elemento fundamental “porque no es un mero acompañamiento”.
De esa otra parte se encarga un Sladkovsky que hace seis años recibió el encargo de tomar las riendas de la Orquesta Nacional Sinfónica de Tatarstán para convertirla en una nueva referencia entre las orquestas rusas de primer nivel. “Empezamos desde cero y ha sido duro” pero los resultados se están empezando a concretar.
Tras esta actuación, el ciclo se volverá a encontrar con las tablas de la calle San Prudencio el 25 de marzo para recibir a la soprano Ainhoa Arteta junto al pianista Rubén Fernández-Aguirre, quienes ofrecerán La voz y el poeta. Homenaje a Federico García Lorca. El 26 de abril se producirá la tercera parada del cartel diseñado este año, una cita especial en la que coincidirán la cantante Pasión Vega y los integrantes, bajo la dirección de Iker Sánchez Silva, de la Gasteizko Ganbara Orkestra. El broche se producirá el 12 de mayo, cuando se unirán sobre el escenario del Principal la Helsinki Baroque Orchestra y la soprano Sophie Karthäuser.