Durango - La compañía Karrikan y su colorido Deshakespearezioa pusieron fin ayer a cinco días de un continuo trasiego de visitantes que ha llenado de vida el pabellón Landako de Durango. La Azoka llegaba este año más pronto que nunca para celebrar una 51ª edición en la que se han superado las 100.000 visitas pero cuya afluencia de público ha resultado bastante “irregular”.

A falta de que se conozcan los datos de asistencia relativos a la última jornada, la presidenta de Gerediaga, Nerea Mujika, ofreció ayer una rueda de prensa en la que estuvo acompañada por la coordinadora de Saguganbara, Itsaso Gangoitia, quien ofreció impresiones sobre los ocho espacios principales de la Azoka; Ruth Manzano, miembro de Musika Industria Elkartea (MIE); y Pello Elzaburu, en representación de la Asociación de Editores Vascos.

La modificación de las fechas en las que ha tenido lugar la Azoka responde a un firme compromiso por parte de la organización con el Ikasle Eguna, en el que alumnos de todos los lugares de la geografía vasca “abarrotaron” los stands. Tras un multitudinario sábado, el domingo constituyó la jornada más potente, llegando a registrarse un aforo completo en algunos momentos, desveló la presidenta de Gerediaga.

El lunes constituyó “toda una sorpresa” para la organización, ya que numerosos autobuses escolares se movilizaron por iniciativa propia a visitar la Azoka. “Se podría decir que ha habido dos días dedicados al alumnado”, sostiene Mujika.

Landakogunea ha constituido, un año más, un punto de encuentro de referencia para la cultura vasca, extendiendo su programación a los ocho espacios principales. Saguganbara ha explotado la creatividad de los más pequeños a través de iniciativas como Talentue Plazara! mientras que Kabi@ ha reforzado la labor comunitaria. Ahotsenea, lugar dedicado a las charlas y actuaciones en directo, ha cambiado a una nueva ubicación en la que “los artistas se han sentido más cerca del público” y Areto Nagusia ha reforzado su posición como “altavoz” para la difusión de temas sociales, señaló Gangoitia.

“Los artistas audiovisuales quieren estar en Irudienea”, prosiguió la coordinadora sobre este lugar que goza cada vez de una mayor audiencia, al igual que Szenatokia, dedicado a las artes escénicas. Plateruena se ha llenado en cada actuación y Azoka TB ha sido los ojos y la voz de lo que ha ocurrido en Durango.

Cal y Arena Pello Elzaburu destacó los altibajos de visitantes que han tenido lugar a lo largo de estos días, generando un ligero descenso en las ventas. Asimismo, el miembro de la Asociación de Editores Vascos subrayó la “implicación activa” de los escritores en la Azoka, donde se acercan a sus lectores para presentarles las mejores propuestas del año.

Las primeras impresiones a pie de stand sobre el menor movimiento de gente eran en muchos casos compartidas, aunque algunas editoriales se muestran contentas con las ventas. “Los últimos meses han sido positivos con lanzamientos como el de Kirmen Uribe o Koldo Izagirre. Hemos mantenido las ventas”, aplaudía Gorka Arrese, de Susa.

Las novedades han constituido, como suele ser habitual, lo más vendido de esta 51ª edición, destacando autores como Jon Andoni del Amo, Patxi Zubizarreta, Arantxa Urretabizkaia, Toti Martínez de Lezea, Jon Arretxe, Ibon Sarasola, la antología poética bilingüe de Joseba Sarrionandia o Luis Garde, Premio Euskadi de Literatura 2016.

Los creadores que optan por la autoedición han aumentado a dieciséis en su tercer año de participación y se muestran contentos. “La gente se ha interesado por nuestro trabajo, cada vez somos más y se ha vendido de todo”, se felicita Elena Azurmendi.

El sector de la música, al que puso voz Ruth Manzano, ofreció ayer una “valoración positiva” y destacó de manera especial el fin de semana. “Las ventas se han mantenido a pesar de un IVA cultural que está haciendo mucho daño”, añadió.

Lo cierto es que las colas frente a los grupos como Gatibu, Vendetta, Esne Beltza o Hesian, que presentaban disco, han sido una constante. “El público ha sido abundante y la mayoría ha venido con ideas concretas: Ruper Ordorika, los trabajos sobre la figura de Xalbador y Oskorri, a quienes muchos han transmitido su cariño”, cuenta Ángel Valdés desde Elkar.

El año que viene Durango dará la bienvenida a una 52ª Azoka que seguirá apostando por impulsar la participación de los visitantes, convirtiéndolos en “participantes” de esta fiesta de la cultura vasca.