Vitoria - Fue en enero de 2015 cuando las primeras imágenes del proyecto se asomaron a las páginas de DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA. De la mano de Correría 2.0 -que reúne a diferentes establecimientos comerciales tanto de esta calle como de Mateo Moraza para el desarrollo de actividades culturales y dinamización- y el colectivo de artistas Art ¡eh!, diferentes creadores locales de distintas disciplinas se estaban poniendo delante de la cámara de Andrea Abáigar para componer Invisibilidad compartida, un proceso registrado a su vez por César San Millán. La idea era poner el foco en aquellas personas sin recursos que pasan desapercibidas para la sociedad, protagonistas de una pobreza que se suele dejar en la sombra, y hacerlo, precisamente, a través de la cara de hombres y mujeres bien conocidos del teatro, la música, las artes plásticas... del territorio alavés.

Por aquel entonces estaba por definir cómo se iba a concretar el final de la propuesta, algo que ahora ya tiene respuesta puesto que ayer por la tarde se abrió en Montehermoso la exposición del mismo nombre que estará abierta hasta el 30 de abril y que tendrá dos complementos. Por un lado, en el mismo centro cultural, las instantáneas creadas por Abáigar estarán acompañadas por el making off llevado a cabo por San Millán, un audiovisual que cuenta con música de Bingen Mendizabal que ha sido registrada con varios alumnos de la Escuela Municipal Luis Aramburu. Además, cinco de las instantáneas de la joven fotógrafa se pueden ver también en otros tantos puntos de las calles Mateo Moraza y Correría.

Bajo la premisa de que todo el mundo puede ser invisible, incluso aquellos más conocidos, el proyecto también tiene otras lecturas, como la propia pobreza a la que se están viendo abocados no pocos artistas a raíz de la actual crisis económica -y en el caso de Álava, por desgracia, se podrían poner unos cuantos ejemplos-. Es más, habría que recordar que muchas de estas imágenes fueron tomadas antes y después de las navidades de 2014-2015, época de un consumo especial.

Carlos Lalastra, Paco San Miguel, Mintxo, Víctor García de la Torre, Carmen San Esteban, Enrique Santa María o Silvia San Miguel, entre otros, son quienes pierden su imagen pública para desdibujarse en una anonimato que, sin embargo, reclama la atención del espectador para hacerle reflexionar.

Además, como sucedió en su día con las intervenciones realizadas por Mintxo en varios escaparates tanto de Correría como de Mateo Moraza, el objetivo de los comerciantes de esta zona pasa también por aportar su grano de arena a la actividad cultural y, de paso, proyectar una determinada imagen sobre sus principios, más allá de los fines económicos de cualquier negocio. De hecho, la palabra colaboración fue la más repetida ayer en la presentación de la exposición por parte de Comerco y el Ayuntamiento de Vitoria.