Fueron dos semanas entre finales de febrero y principios de marzo de 2014. Justo a la mitad, el cuarteto gasteiztarra The Dealers permitió a los lectores de este periódico colarse en la grabación de lo que iba a ser su primer disco de larga duración, un trabajo que, en ese momento, se hacía carne utilizando a la sala Jimmy Jazz (su suelo, no su escenario) como estudio de grabación. Hoy, Serendipic Breakfast ya es una realidad palpable, un álbum, editado por Bickerton Records y Action Weekend Records, que este mismo domingo Oscar, Koldo, Al Sampedro y Mikel van a presentar en directo dentro del ciclo AhotsGora.

Será a partir de las 19.30 horas cuando el grupo se encuentre con el público en el Gora a través de un cartel que compartirá con The Priscillas y cuyas entradas están a la venta por 6 euros en anticipada y 8 en taquilla. Después, eso sí, al cuarteto le esperan actuaciones en Oviedo, Valladolid... y más que se irán confirmando en próximas fechas. Conciertos en los que desgranar temas como Me and the ceiling fans, The lady from the watchtower y Cat of new race, por citar algunas de las once canciones de un trabajo que se puede conseguir desde hoy en digital y que se ha editado también en vinilo (las primeras copias estarán a la venta el domingo) con diseño del propio Mikel Moraza. “Tengo afición por el dibujo y cuando surgió la idea me decidí a hacerlo. Me ha costado bastante, aunque estoy satisfecho”, dice con una sonrisa el cantante y guitarrista sobre la forma, mientras que tiene claro que con el fondo “hemos querido hacer algo especial y creo que lo hemos conseguido”.

“Las primeras sensaciones están siendo muy buenas”, más allá de que “habrá gente que se sorprenda un poco sobre todo si tiene referencias nuestras del directo, donde damos un espectáculo más agresivo. Con este trabajo hemos aprovechado el paso por el estudio para meter muchos arreglos, para hacer un álbum donde todo está más elaborado”, reforzando y completando ese sonido de aire británico que camina por el rock and roll, el R&B, el garage y la psicodelia.

Detrás queda un año y medio que se ha hecho “largo” ya que ha llevado su tiempo todo el proceso de mezclas, diseño, copias... aunque eso no quiere decir que el grupo haya parado. También permanece en la memoria la experiencia de grabar en la Jimmy con el equipo de Sagasound: “fueron jornadas intensas y con un poco de estrés, pero estábamos cómodos”, entre otras cosas porque “fuimos con todo muy bien preparado desde el local” y además “no teníamos la presión de estar en un estudio en el que cada hora te cuesta dinero”.

Dice la Real Academia de la Lengua que la serendipia es el hallazgo valioso que se produce de manera accidental o casual. En realidad, Dealers, más allá de idas y venidas, llevan diez años sobre las tablas, una senda que ahora suma un disco “con muchos matices”, un álbum que “es como un principio”.