el veterano fotógrafo José Luis Ramírez desgrana en Interfaz, exposición que la Sala Amárica acogerá hasta el 11 de noviembre, las huellas que el desarrollo industrial ha ido dejando a su paso por espacios que no le pertenecían. Disgregaciones abruptas a veces, bruscas como un mal cirujano escalpelo en mano, que Ramírez ha captado durante los últimos años apoyado en “la fuerza de la visión de las estructuras industriales contrapuestas a las construcciones urbanas”.
El fotógrafo fija su mirada allá donde “la industria y el hábitat se entrelazan con cierto desorden” y donde “debido a la orografía y la escasez de superficie se producen separaciones bruscas”, ya sea “una carretera, un río o una línea ferroviaria”. El espacio de exposiciones gasteiztarra inaugura Interfaz hoy a las 20.00 horas, pero la muestra fotográfica podrá degustarse hasta el 11 de noviembre.
La diputada foral de Euskera, Cultura y Deporte, Igone Martínez de Luna, presentó ayer una exposición que “nos permite apreciar con detenimiento los diferentes contrastes que muchas ciudades esconden en su seno, sobre todo en ese momento en el que confluyen el urbanismo con la industria”. Como bien incidió la diputada foral de Cultura, “la evolución económica y estructural queda patente en las fotografías del autor José Luis Ramírez, convirtiéndose en una crónica fiable de la sociedad y de la economía actual”.
Nacido en 1935, ingeniero industrial de profesión, el artista vizcaíno que, aunque ha desarrollado al mayor parte de su obra en blanco y negro, ha incorporado el color a su lenguaje en su etapa más reciente -como hace de hecho en la muestra que trae estas semanas a la capital alavesa se adentró en la fotografía con mayor intensidad en los setenta, década en la que cosechó más de cincuenta premios. Entre ellos, la medalla de oro en la Bienal de Valca en 1975.
“Se trata de un fotógrafo de dilatada trayectoria que durante más de cuarenta años ha demostrado tener una visión novedosa y personal de su Bizkaia natal, pero también de infinidad de puntos y temas de gran interés para el público más amplio”, señaló la diputada sobre Ramírez. Interfaz es la última pieza de una colección en la que ha jugado con la evolución de la sociedad, como Vizcaya, tradición y paisaje, Bilboko portua. Ayer/Hoy o Mirar Bilbao.
Según el autor, en Interfaz “las imágenes tienen también el poder de sugerencia de las condiciones medioambientales, visuales o acústicas presentes”. Los amantes de la fotografía tienen hasta el 11 de noviembre para refrendarlo.