gasteiz - Bucear en el arte emergente del País Vasco y Navarra para que los creadores se puedan encontrar entre ellos, con los agentes culturales y con el público. Con ese objetivo nació Inmersiones y con la misma idea llega desde hoy su séptima edición, una nueva entrega que en su título fusiona los conceptos de resistencia e insistencia para decir que “somos reinsistentes”.
Con propuestas que son fijas pero también con novedades se presenta una iniciativa que va a citar en la capital alavesa a decenas de creadores para tomar parte en el amplio programa diseñado por la asociación Inmersiones, que se acaba de generar para dar estabilidad al proyecto, y el comisario seleccionado para la ocasión, el artista e investigador gasteiztarra Iker Fidalgo. Todo ello “con muy pocos recursos económicos, aunque con eso poco hacemos más que mucha otra gente, sobre todo hacemos una labor que debería ser responsabilidad de las instituciones, aunque no la asumen”, explicaron ayer sus responsables.
Dentro de la programación preparada, no faltarán hoy y mañana, en la calle Pintorería 86, dos nuevas entregas del ciclo Hospitalarios, un punto de encuentro entre creadores y público en el que quien quiera podrá pasarse para hablar con los artistas sobre sus proyectos. En esta primera jornada, ahí estarán el Colectivo Santxez y Kapone, autores gasteiztarras a los que mañana (también de 10.00 a 14.00 y de 16.00 a 20.00 horas) tomarán el relevo Pau Figueres y el grupo formado por María Fernández de Viana y Xabier Dobaran.
También en estas dos primeras jornadas, aunque ya no quedan plazas, se producirán en Artium los talleres que sobre ilustración y creación de dosieres artísticos ofrecerán, respectivamente, Enrique Flores y Verónica Eguarás.
En lo que respecta sólo a hoy, de la mano de Rubén Díaz de Corcuera, la Virgen Blanca será escenario, entre las 10.00 y las 12.00 horas, de una acción bautizada como Recogida de firmas a favor de una muerte digna para los excedentes laborales, una propuesta en la que no se espera recoger ninguna rúbrica sino, desde la ironía, plantear a los viandantes una reflexión sobre la situación económica y social actual tanto dentro como fuera del mundo artístico.
Ya el sábado, Ortzai volverá a ser el punto de encuentro del congreso de artistas emergentes, por el que pasarán una quincena de creadores para presentar sus últimos proyectos y que culminará con una mesa redonda. Además, de la mano de Nerea Lekuona, se llevará a cabo un simbólico campeonato de txingas para reflejar el “peso” con el que carga el arte emergente.