MADRID. Uno de los más golosos es el Belén de Chocolate de Rute (Córdoba) realizado por los maestros pasteleros de la empresa Galleros Artesanos desde hace casi cien años. El belén, para el que han utilizado 1.450 kilos de chocolate negro y que recrea diferentes rincones de Andalucía, se podrá visitar hasta el 6 de enero.
En Andalucía, también destacan los belenes vivientes de Beas (Huelva) --que este año cumple su 45 edición-- y de Arcos de la Frontera, declarado fiesta de Interés Turístico Nacional, que se podrá ver el próximo 20 de diciembre a partir de las 18,00 horas.
Asimismo, en Tomares (Sevilla) se expondrá hasta el 5 de enero en el Salón de Exposiciones del Ayuntamiento el Belén de Playmobil que con una extensión de cerca de 60 metros cuadrados y más de 4.500 piezas desde 1974, se convierte, según sus creadores en "el más grande de España" de estas características.
Por otro lado, en Murcia cobran protagonismo el Belén de Salzillo, realizado por Francisco Salzillo entre 1776 y 1783 para un noble murciano con figuras de unos treinta centímetros modeladas en arcilla, considerado el belén barroco más importante del mundo; y el Belén Napolitano de los hermanos García de Castro, ubicado como el anterior en el Museo Salzillo.
CON MARIONETAS O DE UN FRAILE CAPUCHINO
Mientras, en la Comunidad Valenciana, el nacimiento más curioso y conocido es el Belén de Tirisiti, en Alcoi (Alicante), hecho de marionetas y declarado Bien de Interés Cultural. Además, en Valencia, otro belén que en los últimos años recibe muchos visitantes es el del fraile capuchino Conrado Estruch, de carácter benéfico, que se compone de más de 1.000 nacimientos elaborados con materiales de desecho.
También reciben muchas visitas en estas fechas navideñas los belenes de La Rioja, concretamente, el Belén Mecánico de Arenzana de Abajo, obra del carpintero Pedro Moral, hecho de tallas de maderas, cuyo sistema de funcionamiento está basado en engranajes y transmisiones de movimientos y donde los motores que producen la energía proceden de ventiladores, tocadiscos y limpiaparabrisas antiguos.
En cualquier caso, uno de los más populares es el belén viviente de Alcanadre, sobre el monte Viso, en el que participan unas 50 personas y que tiene más de cuarenta años de historia. También viviente es el Pessebre de Bàscara, en Girona, que con más de 300 actores, pretende plasmar a tamaño natural el nacimiento que hacen los habitantes de la zona con figuras de barro en sus casas.
Más al norte, en el País Vasco, merece mención el Belén Monumental que se instala cada año en el Parque de la Florida de Vitoria formado por más de 300 figuras realizadas a tamaño natural y que data de 1962. Este nacimiento se puede contemplar hasta el 6 de enero.
HECHOS CON CORCHO Y PIÑAS
Por su parte, Cantabria celebra cada Navidad la Ruta de los Belenes con más de una treintena de pesebres repartidos por las distintas localidades de Santillana del Mar, una iniciativa impulsada hace años por vecinos, instituciones, asociaciones y empresarios. También es característico el nacimiento que se monta en la localidad de Barcenaciones, en el municipio de Reocín, obra de Fidel Fernández, que utiliza como materiales principales tapones de corcho y piñas.
En Asturias, un clásico es el Belén Monumental de Villamayor, que montan desde hace casi 20 años dos cuñados: Rafael Rojo del Valle y Raimundo García Rodríguez, y consta de 120 figuras. Otro portal Monumental es el de la Asociación Belenista de Oviedo ubicado en la plaza de la Catedral. De estilo hebreo es el Belén Monumental de Gijón, con piezas del escultor madrileño José Luis Mayo Lebrija.
Mientras, en Galicia, otro nacimiento que recibe miles de visitantes al año es el de Valga, declarado fiesta de interés turístico porque tiene la particularidad de que se mezclan pasajes bíblicos con oficios representados por personajes conocidos de la ciudad, famosos o elementos de la actualidad, como lo fue en su día, por ejemplo, el Mundial de Fútbol.
Castilla y León también se caracteriza por sus belenes, entre los que destacan el Belén Napolitano del Museo Nacional de Escultura de Valladolid que representa los textos bíblicos y leyendas cristianas y data del siglo XVII; y el Belén de Folgoso de la Ribera (León), compuesto por 200 figuras con movimiento, que ocupa una plataforma de 98 metros cuadrados y que se monta desde 1963.
UN PESEBRE A 2.228 METROS DE ALTURA
En Picos de Urbión (Soria), a una altura de 2.228 metros, es tradición desde 1955 subir el domingo antes de Navidad andando o en moto de nieve para admirar un belén hecho en madera o en forja. Fue el Club de Montaña de Soria el que inició esta tradición. Por otra parte, en Palencia, se podrá visitar la colección de 600 belenes del Monasterio de Santa Clara de Carrión de los Condes procedentes de Africa, Asía, Europa y América.
Además, este año, se podrá visitar un belén en el Museo de Mariemma, en Iscar (Valladolid) en el que las protagonistas son las muñecas Nancys.
En Castilla La Mancha, destaca el Belén del Tronco de la Suerte que se instala en el Museo Municipal López-Villaseñor y está compuesto por la escena del Misterio, con algunos pastores y los Reyes Magos, y se monta en un tronco de un árbol centenario. También es reseñable el nacimiento de la Asociación de Belenistas de Cuenca en el que trabajan de manera altruista medio centenar de personas y que está formado por más de 500 figuras.
Por su parte, Madrid acogerá belenes artísticos, vivientes y solidarios. Entre los primeros, destaca el que albergará el Palacio de Cibeles hasta el mes de febrero, un nacimiento de estilo napolitano de los Duques de Cardona, que data del siglo XVIII, cuando fue encargado por el duque de Medinaceli. En la segunda categoría, se encuentra el pesebre viviente de El Berrueco que este año celebra su XVI edición y que se representará los días 20 y 27 de diciembre a partir de las 18,00 horas.
Finalmente, entre los belenes solidarios, este año se ha inaugurado el de Mensajeros de la Paz, realizado por el artista Ikella Alonso, que convierte el castillo de Herodes en un campo de golf custodiado por guardias romanos y rodeado por una valla con concertinas y en el que todas las figuras son de raza negra. Las personas que acudan a visitarlo en la Capilla de Nuestra Señora de la Soledad, están invitadas a hacer una aportación de alimentos que se destinarán al Banco Solidario de la organización.