Londres - El hombre más alto y el más bajo del mundo, inscritos en el Libro Guinness de los récords, se encontraron ayer por primera vez en el Hospital St. Thomas de Londres, con motivo del sexagésimo aniversario del Guinness World Records. Los plusmarquistas de estas estaturas son Sultan Kösen, un turco de 31 años que mide 2,51 metros, y Chandra Bahadur Dangi, un nepalí de 74 años que sólo mide 54,6 centímetros.
Sultan, que también tiene el récord de la persona viva con las manos más grandes -28,5 centímetros- posee este particular registro desde 2009, cuando desbancó del puesto al chino Xi Shun. “Estoy muy contento de ser la imagen en el 60 aniversario de Guiness World Record y espero que ellos duren por lo menos sesenta años más”, declaró el alto turco, y añadió que él “ya había cumplido su sueño” al casarse hace un año con su actual mujer.
Por su parte, Chandra Dangi, actualmente el adulto vivo más pequeño del mundo, es también el más bajo de la historia -según el registro del Guinness World Records-, y es el sucesor de Gul Mohammed, que falleció en 1997 con una altura de 57 centímetros. Para el diminuto nepalí, también es “una alegría” ser la imagen en este sexagésimo aniversario, y declaró que esto le ayuda a “viajar y conocer gente”, ya que “en Nepal la vida es muy difícil”, a pesar de que recibe mucha “ayuda” de parte de su familia.
En su primer encuentro, tanto público como privado, ambos resaltaron “la emoción y la sorpresa” al verse por primera vez, lógico si se tiene en cuenta que entre ambos hay una diferencia de 196 centímetros. Ambos tomaron té y charlaron un rato. “Estoy feliz de encontrarme con el hombre más alto del mundo, tenía curiosidad por ver a mi extremo opuesto”, dijo Dangi. “Me preguntaba a qué altura de la pierna me llegaría”, respondió Kösen. - Efe