Vitoria - Casi una veintena de citas van a dar forma desde hoy hasta finales de marzo del próximo año a la vigésimo quinta edición del ciclo Martes Musicales. Cinco meses a lo largo de los cuales se sucederán propuestas de cámara con músicos lejanos y cercanos, jóvenes y ya veteranos. Recitales en los que celebrar algo cada vez más extraño en el sector cultural, que una programación perdure en el tiempo, más allá del hecho innegable de que la crisis económica afecta.
Esta temporada, que concluirá el 31 de marzo de 2015 con la actuación
Fue en 1990 cuando se llevó a cabo la primera edición de unos Martes Musicales que han visto pasar a artistas de lo más variado. Desde Ara Malikian hasta Al Ayre Español la lista de presencias es amplia, actuaciones que, por lo general, siempre han contado con la presencia de un público fiel. En lo que respecta a esta vigésimo quinta edición, hace ya unas semanas que se pusieron a la venta los abonos, aunque quienes prefieran conseguir entradas sueltas, éstas estarán a la venta una hora antes de cada recital por 8 euros en la taquilla del Aula Fundación Caja Vital, escenario habitual de la propuesta musical.
Así sucederá hoy a partir de las 20.00 horas en el concierto inaugural, que corresponderá al sexteto Soncello Ensemble, que desgranará un programa compuesto por piezas de Haydn, Grieg, Piazolla, Vivaldi, Falla y Kaiser-Lindemann. La agrupación, surgida en 2011 al amparo de la Asociación de Violoncellistas de Galicia y a instancias de Carolina Landrascini, se estrenó ante el público en el marco de la primera Xuntanza Soncello.
El grupo está formado por la bonaerense Landrascini realizó sus estudios en la academia Arrasate Musical de Mondragón, el conservatorio de Baiona y en la Universidad de Indiana. Inició su andadura profesional en orquestas como la Sinfónica de Euskadi. y desde 2008 ejerce la docencia en el Conservatorio Superior de Música de A Coruña. También es parte de la agrupación, Isabel Font Belmonte , cuya actividad camerística le ha llevado a formar parte del Trío de Cuerda Antares.
A su lado está Criptana Angulo Manzaneque, que nació en Madrid y que ha sido miembro de diversos grupos de cámara como el Cuarteto Joven de Madrid o el Cuarteto Bartok. No falta tampoco Amaia Garrido San Juan, natural de Barakaldo. Componente de la Joven Orquesta de Euskal Herria, en la actualidad es la violonchelista del espectáculo de magia El puente invisible.
El quinto componente del grupo es el donostiarra Gustavo Cascón Góñez, que hasta ahora ha participado en diferentes agrupaciones como la Joven Orquesta de la Sinfónica de Galicia. Y completa la formación Saúl Nogareda Candal, que en la actualidad cursa Grado Superior en el Conservatorio Superior de Música de A Coruña.